La celebración más especial para papá llega cada tercer domingo de junio en México como una manera de agradecer el amor y la responsabilidad que asume dentro de una familia.
Ante ello, Día del Padre inspiró uno de los artículos en la nueva edición de la revista Proteja su Dinero, de la Condusef, para orientar a aquellos papás primerizos sobre cómo mantener las finanzas equilibradas y bien organizadas a la hora de tener una hija o hijo. Aquí te explicamos de qué se trata.
"Recuerda que tu hija o hijo crecerá y en cada etapa de su vida necesitará cosas distintas, además de que algunas etapas serán más caras que otras", refiere la revista de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros.
Plan financiero antes del nacimiento
Tu primer plan, el financiero, no sólo debe contemplar los gastos del embarazo, como citas médicas y estudios de mamá, también debe contemplar el nacimiento del bebé y aspectos como su educación y salud posterior. Pero vámonos paso a pasito.
Paso 1. Analiza la situación de tus finanzas. Haz un presupuesto familiar de forma realista, el cual incluya tus ingresos netos, gastos y deudas actuales.
En éste debes considerar gastos fijos (pago de renta, luz, internet, despensa, transporte, etcétera); gastos variables o para imprevistos. Además, eliminar los gastos innecesarios, esto porque deberás de incluir los nuevos gastos que se generen antes y después del nacimiento de tu bebé.
Es importante incluir costos de estudios, según datos de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), tales como:
- Biometría hemática (2 mil pesos),
- Química sanguínea (900 pesos),
- Ultrasonidos obstétricos (hasta 600 pesos), y
- Costos por parto natural, de entre 9 mil 660 hasta los 28 mil 999 pesos o
- Cesárea, entre 11 mil 990 y 43 mil 999 pesos,
"Este paso será clave no solo durante el embarazo y nacimiento del bebé, también durante su etapa de crecimiento, por lo que tu presupuesto deberá ser a largo plazo", refiere la Condusef.
Paso 2. Contempla un fondo para diversas necesidades e imprevistos, como educación, emergencias médicas, incluso respaldo en caso de que tú o la mamá de tu bebé lleguen a fallecer, entre otros.
Paso 3. Crea un plan de pagos. Para que tus ingresos y el presupuesto familiar no se vean comprometidos y exista flexibilidad para afrontar los gastos.
Identifica tu capacidad de pago: suma de ingresos menos total de gastos, igual a capacidad de ahorro o de pago.
Paso 4. Haz una lista de tus deudas, en la que incluyas montos, intereses y plazos, así como enumerarlas por orden de importancia. Existen dos formas de priorizar tus deudas, la primera es empezando con la deuda de menor monto y plazo, la segunda es comenzando por la de mayor interés.
"Una vez que tengas clara esta información, puedes armar un plan de pagos mensual, para ello destina por lo menos 10 por ciento de tu ingreso y de ser posible cubre un poco más del pago mínimo; lo importante es que nunca dejes de pagar hasta liquidar el total de tus deudas", refiere.
¡Ya está por nacer!
El siguiente paso es hacer un plan de compras previas de las cosas que necesitará el o la bebé. Con una buena planeación podrás aprovechar las temporadas de ofertas que te ayudarán a economizar.
La habitación del bebé suele ser cara. Deberás contemplar la cuna con colchón, el edredón, bañera, ropa, accesorios, que en total ronda un costo aproximado de casi 24 mil pesos.
Si a esto le sumas un columpio, radios vigila bebés, un calienta biberones, entre otras cosas, el monto puede alcanzar más de 34 mil 600 pesos.
Los pañales, cremas, pomadas y talcos, pueden alcanzar un precio arriba de los 5 mil pesos mensuales.
Por último, si quieres considerar un transporte para el bebé, una carriola y una silla para el coche, lo cual puede llegar a costarte al rededor de 3 mil 200 pesos, de acuerdo con Business Insider México.
El futuro de tus hijos
Conforme crece tu bebé los gastos y planes tendrán que ir evolucionando; es en esta etapa donde contar con una planeación te será de gran ayuda para proteger el patrimonio y futuro de tu hija o hijo, y aquí te diremos cuáles son:
Seguro de vida. En cualquier momento puede ocurrir algún imprevisto y no cumplir ese plan de vida, dejando, además, una situación financiera complicada para tu familia, por lo que contar con un seguro de vida puede ayudarte a dejar protegidos a tus seres queridos.
- Existen dos tipos de seguros de vida (temporal y permanente), pero te recomendamos que revises bien las coberturas que incluye tu póliza antes de contratarla.
Fondo o seguro educativo. Se acuerdo con el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), el costo aproximado por una licenciatura, en una universidad privada, ronda de los 125 mil a 930 mil pesos, el costo dependerá de la universidad que elijas y la carrera. Planear sobre cómo pagarás la educación, no es una mala idea.
Existen productos financieros que pueden apoyarte como fideicomisos, fondos de ahorro o un seguro educativo. Sobre este último, su función es muy parecida al seguro de vida, ya que también incluye una cláusula donde en caso de que llegues a fallecer o sufrir alguna incapacidad física, se le dará al beneficiario el monto acordado para que pague las colegiaturas y los gastos de la universidad.
Con un seguro educativo podrás comenzar a ahorrar para su educación, realizando pagos de forma mensual, trimestral, semestral o anual.
Seguro médico. La salud de tu bebé es muy importante, al igual que la de tu pareja o cónyuge, de ahí que contar con un seguro de gastos médicos te permitirá en caso de algún accidente, enfermedad o urgencia médica, contar con intervenciones quirúrgicas, gastos hospitalarios, alimentos y medicamentos, análisis clínicos, y rayos X, entre otros.
Es importante que investigues y compares cuál es el seguro que más te conviene y se adecua a tus necesidades.
MRA