Despertarse a las cinco de la mañana para prepararse y alistar todos los detalles antes de correr un Medio Maratón o un Maratón de la Ciudad de México fue otra de las ex- periencias que la pandemia de covid-19 le robó a Hazel J., quien cada año sin excepción corría las calles de la capital. “Correr no es solo un deporte, es un estilo de vida”, dice la maratonista.
Como ella, miles de personas en el país no pudieron cumplir la ilusión de superar la meta o lograr un objetivo debido a la cancelación de los Maratones en México por la pandemia, y aunque la industria del running se ha sumado a la tendencia digital, la sensación de llegar a la meta no es la misma para los participantes.
Según datos de Run México, actualmente existen un millón de corredores en el país y se espera que en cinco años se sumen 600,000 más y no solo de México, sino también de países como Estados Unidos, Canadá y Kenia, este último, país origen de Duncan Maiyo, quien ganó el último Maratón de la Ciudad de México en 2019 al cruzar la meta en un tiempo de 2 horas 12 minutos 52 segundos.
Desde hace siete años, la industria del running en México vivía un boom y, todo parecía indicar que este momento dorado se mantendría por mucho tiempo más, pero las restricciones por covid hicieron que los organizadores de carreras adoptaran la tecnología para transportar las competencias al mundo virtual. “Lo que buscamos en Run México es profesionalizar el running.
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Queremos llevar a otro nivel el desarrollo de los eventos, utilizar las nuevas tecnologías para saber qué es lo que buscan los corredores, qué es lo que quieren, porque cada vez son más exigentes; entonces, queremos que vivan una buena experiencia, y eso nos va a ayudar a incrementar el número de corredores a pesar de la pandemia”, dice Marco Antonio Liceaga, fundador y presidente de Run México.
El directivo es consciente de que la recuperación de la industria será complicada, debido a que en 2019 hubo 2,017 carreras en toda la República —unas 168 competencias por mes— y el año pasado se redujeron en 88%. Previo a la aparición del covid-19, entre enero y marzo de 2020, se celebraron 241 carreras, pero ya con la pandemia encima, en el resto del año solo se hicieron 16, es decir, 257 eventos en total.
Y no se augura una recuperación pronta en número de eventos hasta 2023. Carreras en pausa El negocio es liderado por Emoción Deportiva, Sport Promotion y Total Running, que junto con As Deporte y Mx Race dominan el 70% del mercado en México.
Según Run México, la pandemia dejó sin aliento a la industria en el país, con una pérdida económica de 3,400 millones de pesos (mdp) entre organizadores, patrocinadores, personal de logística, producción, fabricantes de medallas, personal médico y los maquiladores de playeras.
Si no se reactiva la organización de carreras presenciales en algún momento de 2021, las pérdidas podrían incrementarse y afectar a más de 150 organizadores y al- rededor de 100 marcas, no todas deportivas, que patrocinan las competencias como estrategia de mercadotecnia. “El ingreso comercial por concepto de patrocinios hace que las carreras sean sustentables. Se cree que el operador de carreras se hace rico, pero si desglosamos el ingreso y el gasto, la utilidad neta queda entre 12 y 15%”, dice Marco Antonio Liceaga, presidente de Run México y director Sports Promotion.
“Además es un riesgo”, señala el directivo, “porque hay ya tanta oferta de carreras que a veces no se llenan y los organizadores planean una cantidad específica de asistentes para salir con números negros”, dice Liceaga.
En el desglose del costo por una carrera, 16% se retiene por impuestos, y entre de 20 y 25% —dependiendo de la ciudad— corresponde al pago de los permisos, sin olvidar también el pago por toda la producción, indica el presidente de la organización deportiva. Todo esto sin mencionar que una persona invierte anualmente entre 3,000 y 6,000 pesos en productos, carreras y ser- vicios alrededor de la carrera en nuestro país.
Se estima que, una carrera atrae cerca de 1.7 espectadores por cada competidor, es decir, en un evento de 10,000 participantes, las marcas pueden impactar cerca de 30,000 personas, según cifras de Run México.
Los patrocinios, por ende, son motor de una industria que vale en México anual- mente 35,000 mdp, aunque el año pasado el valor del mercado cayó cerca de 900 mdp por la pandemia. David Álvarez, director comercial de As Deporte, dice que “todos estamos abordo del barco, corredores, autoridades y empresas, pero hay marcas que se han bajado por completo de los eventos. Si planeamos una carrera de pocos participantes, se bajan casi el 30% del patrocinio”.
Pero dice que la emergencia sanitaria les impidió realizar carreras en todo 2020 y estima que la activación presencial podría darse hasta el segundo semestre de este año, “si bien nos va”.
El regreso de las carreras a las calles de CDMX, Guadalajara y Monterrey lo ven lejano, por lo que analizan dialogar con las autoridades para reabrir. “Algo que podemos hacer como organizadores de carreras es ir a hablar con la autoridad, así como lo hicieron los restauranteros, que nos permitan iniciar poco a poco con carreras pequeñas”, dice Liceaga, de Run México.
Por su parte, As Deporte liquidó al 50% de su plantilla y se enfocó en los triatlones y carreras de obstáculos. “En nuestro caso, estamos recortando gastos lo más que se puede, aguantando para darle la vuelta a esto, nuestro ejemplo ha de ser el de muchos, bajando el gasto al máximo”, dice Álvarez.
Octavio Martínez, director de eventos deportivos de As Deporte, apunta que “el mercado del Trail (sendero) está creciendo mucho, la gente quiere salir a espacios abiertos, y esto nos da una gran oportunidad para desarrollar protocolos sanitarios muy estrictos para contrarrestar el covid-19 en las competencias”.
Mientras Total Running, que tenía su fortaleza en licencias como Hello Kitty y The Color Running México, dejó de interactuar en redes sociales y mandó a todo su personal a casa desde julio.
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Eventos virtuales
La pasión por correr no se detiene. Aún en pandemia miles de maratonistas adaptaron sus rutinas de entrenamiento y formas de participar desde la comodidad de la casa en la nueva modalidad de maratones digitales, que se ha convertido en una creciente tendencia deportiva. La cancelación de eventos masivos presenciales llevó a las firmas a saltar al mundo digital.
TroTime, por ejemplo, invirtió en tecnología para entrar a las carreras virtuales. “Si bien no es una solución definitiva, es una manera de seguir vigentes, todos hemos tenido que invertir, no es fácil que el corredor quiera pagar por correr en su casa o en su colonia”, dice Fernando Galindo, director TroTime.
De acuerdo a una encuesta realizada por Run México, 3 de cada 10 corredores no están interesados en las carreras virtuales; del resto resalta que el 49.3% está de acuerdo, pero ansía las presen- ciales, mientras que 11.6% se interesa por algunos eventos y al 11% restante les entusiasma tener eventos.
Una modalidad que han implemen- tado los organizadores para las carreras virtuales es que cada persona corra el día y a la hora que quiera, por ejemplo, el Maratón Powerade de 10k y 21k, se rea- lizó entre el 7 y 13 de diciembre, y este podía realizarse incluso en caminadora.
“Esperábamos 2,000 y se inscribieron 6,005 corredores, nos fue súper bien, 80% lo hicieron en una sola sesión”, señala Edilberto González Serna, director general del Maratón Powerade. En tanto, Emoción Deportiva, que ya había incursionado en las carreras digitales desde 2019, aceleró su implementación con eventos especiales mensuales para festejar cumpleaños.
“Se podría decir que más de 90% de eventos presenciales se vinieron aba- jo, a partir de abril logramos recuperar algunos de manera virtual con 35% de participación. Rescatamos el año”, menciona Sergio Aguilar, director general de Emoción Deportiva.
Todos coinciden que la nueva moda- lidad digital provee de mayor inclusión a esta práctica deportiva. Y hasta que no les den el banderazo de salida, los maratonistas tendrán que seguir compitiendo de forma virtual.