El Fondo Monetario Internacional (FMI) informó que su Directorio Ejecutivo respaldó una nueva estrategia para fortalecer a los estados frágiles y afectados por conflictos, debido a que pueden tener un impacto económico a largo plazo en los países miembros, así como porque los efectos indirectos pueden afectar la estabilidad macroeconómica y las perspectivas de crecimiento en las naciones vecinas.
De acuerdo con el FMI, entre otros elementos, el Directorio Ejecutivo del FMI apoyó construir progresivamente instituciones que desempeñen de manera efectiva funciones de política macroeconómica, hacer un uso completo de la flexibilidad existente en el conjunto de herramientas de préstamo y mejorar el diseño del programa a través de marcos macroeconómicos realistas.
El organismo internacional enfatizó que esto es importante porque los estados frágiles y afectados por conflictos albergan a casi mil millones de personas que enfrentan una variedad de desafíos prolongados, desde una capacidad institucional reducida y una prestación de servicios públicos limitada, hasta el desplazamiento forzado y la guerra.
Añadió que la fragilidad y los conflictos también se ven afectados por el cambio climático, la inseguridad alimentaria, las desigualdades de género y, más recientemente, por las repercusiones económicas del covid-19, pues la pandemia ha afectado de manera desproporcionada a los países, en términos del impacto en los ingresos per cápita, la inflación y la deuda pública.
Además, agregó el FMI, los estados frágiles y afectados por conflictos corren un riesgo significativo de quedarse atrás en su recuperación posterior a la pandemia, pero también en el logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
En este contexto, en general, las medidas propuestas para calibrar aún más los instrumentos y las modalidades de compromiso del FMI con las condiciones del estados frágiles y afectados por los conflictos fueron respaldados por el Directorio Ejecutivo del organismo internacional.
MRA