La armadora de autos Volkswagen de México continuará con paros intermitentes durante los próximos meses a causa de la escasez de semiconductores; sin embargo, no se contempla una reducción en la plantilla laboral.
Actualmente, la empresa con sede en Puebla suma 11 mil 503 colaboradores, incluido personal técnico y administrativo.
Mauricio Kuri Curiel, director de Comunicación Corporativa y Asuntos de Gobierno de Volkswagen de México, apuntó que, la reducción en el abasto de semiconductores ha generado un cuello de botella para la industria automotriz, por lo que la planta armadora ha tratado de mantener la producción en las mejores condiciones posibles.
En entrevista para MILENIO Puebla, Kuri Curiel comentó que su producción es intermitente en sus tres segmentos de fabricación: Taos, Tiguan y Jetta, sin que esto implique bajas de personal.
“Siempre que hay bajas en la producción es latente la posibilidad, sin embargo, en este momento no hay ninguna señal de que esto vaya a suceder”, señaló.
Respecto a la estrategia mundial del Grupo Volkswagen sobre movilidad eléctrica, dijo que por ahora no se contemplan ajustes para la planta Puebla; sin embargo, “son planes constantes que se revisan, pero no hay nada confirmado aún”.
Kuri Curiel vislumbró un mejor horizonte en los niveles de manufactura para la planta local hacia finales de este año, toda vez que los modelos fabricados en Puebla se mantienen en el gusto de los consumidores en diferentes regiones del mundo.
“Hemos tenido una producción intermitente en los tres segmentos, pero poco a poco se empieza a vislumbrar que podemos ir regresando a la producción en las próximas semanas. Definitivamente el horizonte es mejor porque recordemos que a finales de 2020, después de los paros ocasionados por la pandemia, empezó la producción en la planta de la nueva Taos que ha sido muy bien recibida en el mercado nacional y Estados Unidos”, comentó.
La planta armadora ha reportado intermitencias en la producción desde inicios de este año a causa de la falta de componentes.
AFM