La automotriz General Motors (GM) dio a conocer qué ajustó su producción con motivo de la falta de semiconductores que ha permeado a la industria para la manufactura del sector en todo el mundo.
Por lo anterior, precisó que su planta de ensamble en Silao, Guanajuato, tendrá un paro técnico en la semana en curso, esperando retomar su producción para el 1 de noviembre.
La empresa agregó que la situación sigue siendo compleja y variable, por lo que su planta de ensamble en San Luis Potosí también retomará operaciones el próximo lunes.
Entre las afectaciones que ha traído la escasez de componentes, la compañía dejó de producir el Chevrolet Blazer, no obstante, el vehículo volvió a manufacturarse desde el 18 de este mes, en su planta de ensamble de Ramos Arizpe.
Añadió que en esta planta, ubicada en Coahuila, se espera que la producción del Chevrolet Equinox retome su paso para el 1 de noviembre.
“Los ajustes recientes de producción continúan siendo una consecuencia de las restricciones por covid-19 que los proveedores de semiconductores están enfrentando en mercados internacionales”, agregó.
Pese al panorama, la firma externó su confianza en su equipo para encontrar soluciones “creativas”, encaminadas a minimizar los impactos a sus plantas de manufactura.
Por su parte, el pasado 6 de octubre, la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA) ventiló que espera una disminución de la producción automotriz de entre 4.7 y 5 por ciento al cierre de este año frente a 2020, como consecuencia en la falta de insumos para su manufactura. El retroceso implicará una baja de entre 550 y 600 mil unidades.
El director general del organismo, Frausto Cuevas, añadió que el impacto por la escasez de semiconductores ha sido tal, que la AMIA tuvo que ajustar recientemente sus expectativas a la baja en la producción del sector, en comparación con los niveles previstos a inicio de año.
AMP