En los primeros nueves meses del año, el subejercicio del gasto público continuó, mientras que los ingresos públicos no alcanzaron lo previsto en el programa de la Ley de Ingresos, debido a menores recursos petroleros, de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y tributarios; no obstante, el superávit primario y el déficit público fueron mejor a lo esperado, informó la Secretaría de Hacienda.
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De acuerdo con el reporte de las Finanzas Públicas y la Deuda Pública, en el lapso enero-septiembre de 2019, el gasto neto pagado se ubicó en 4.18 billones de pesos, monto inferior al previsto en el programa del Presupuesto de Egresos en 151 mil 337 millones de pesos.
A su interior, el gasto programable fue menor al programa en 80 mil 992 millones de pesos, lo que obedece principalmente a un menor gasto en 23 mil 658 millones de la Administración Pública Centralizada y en 91 mil 788 millones en el IMSS, el ISSSTE y Pemex, conjuntamente, que se compensan parcialmente por el mayor gasto de la CFE respecto a lo originalmente previsto por 33 mil 738 millones de pesos.
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Al excluir la aportación patrimonial del gobierno federal a Pemex, el gasto programable de la Administración Pública Centralizada es menor en 120 mil 789 millones de pesos a lo previsto.
En tanto, el gasto no programable fue inferior en 70 mil 345 millones de pesos a lo previsto, debido al menor costo financiero, menores participaciones y un menor pago de adeudos de ejercicios fiscales anteriores (Adefas) y otros.
Por su parte, los ingresos presupuestarios totales del sector público fueron inferiores al programa en 12 mil 6 millones de pesos y mayores en 1 por ciento real respecto a los recaudados en igual lapso del año anterior.
La desviación respecto al programa se explicó por menores ingresos petroleros en 62 mil 393 millones de pesos, debido principalmente a una menor plataforma de producción y volumen de ventas internas de Pemex; menores ingresos de la CFE en 8 mil 758 millones; menores ingresos tributarios en 68 mil 87 millones respecto al programa, debido principalmente a una menor recaudación del IVA neto.
No obstante, esto se compensó en parte por ingresos no tributarios superiores a lo previsto y por ingresos de las entidades de control presupuestario directo (IMSS e ISSSTE) mayores en 17 mil 666 millones de pesos.
Al excluir la aportación patrimonial del gobierno federal a Pemex, los ingresos petroleros registran una desviación con respecto a lo aprobado de 159 mil 524 millones de pesos, lo que implica una caída de 17.7 por ciento con respecto al tercer trimestre de 2018.
Deuda pública asciende a 10.692 bdp
Al cierre del tercer trimestre de 2019, el saldo histórico de los requerimientos del sector público (SHRFSP), la versión más amplia de la deuda pública, ascendió a 10.692 billones de pesos; como proporción del producto interno bruto (PIB), el SHRFSP se ubicó en 43 por ciento, menor en 1.9 puntos porcentuales al nivel observado al cierre de 2018.
En este contexto, la Secretaría de Hacienda informó que el balance primario registró un superávit de 279 mil 868 millones de pesos, que se compara favorablemente con un superávit programado de 153 mil 93 millones de pesos, mientras que el balance público presentó un déficit de 160 mil 226 millones el cual es menor al déficit previsto para el periodo de 349 mil 533 millones de pesos.
lvm