El Instituto Mexicano de Contadores Públicos (IMCP) informó que prepara una propuesta de reforma fiscal para 2022 de forma conjunta con el Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF) y con la Asociación Nacional de Abogados de Empresa (Anade), la cual será presentada en las próximas semanas, antes del Paquete Económico de 2022, que tiene como fecha límite el 8 de septiembre.
“Los tres organismos hemos venido trabajando de manera independiente en este análisis; sin embargo, ya nos pusimos de acuerdo y vamos a tener una reunión la próxima semana”, refirió Diamantina Perales, presidente del IMCP.
En videoconferencia con medios, señaló que muchas de las propuestas que ayer presentó el IMEF se relacionan con las que el IMCP ha manifestado, pero se necesita una propuesta conjunta, fortalecida y analítica, con el objetivo de medir su viabilidad técnica y legal.
Entre las propuestas de reforma del IMCP destaca disminuir la tasa del Impuesto sobre la Renta (ISR) corporativo y autorizar la deducibilidad completa de prestaciones de previsión social, entre otros estímulos necesarios para la reactivación económica de las empresas.
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Además, propone establecer un impuesto al patrimonio, también conocido como “impuesto a las grandes fortunas”, bajo dos posibles escenarios; primero, el imponer una tasa general de 1 por ciento sobre el patrimonio neto de las personas que tengan un patrimonio de 20 millones de pesos o más.
Segundo, un esquema progresivo, partiendo de la tasa de 1 por ciento para patrimonios de entre 20 y 49.9 millones; 1.5 por ciento para patrimonios de entre 50 y 69.9 millones; y de 2 por ciento para patrimonios de 70 millones en adelante.
Con esto, el IMCP proyecta una recaudación por estos impuestos de entre el 0.21 y 0.28 del producto interno bruto (PIB).
El IMCP también propone el incremento a la base del Impuesto al Valor Agregado (IVA), mediante la reducción de exenciones, pues no es viable un aumento en la tasa general del 16 por ciento, pero sí aumentar la base gravable mediante la eliminación de varios tratamientos especiales contemplados en la Ley del IVA, con excepción de la tasa cero aplicable a alimentos y medicamentos.
Ayer el IMEF propuso, entre otros puntos, adecuaciones al Régimen de Incorporación Fiscal, deducción del 100 por ciento de las prestaciones sociales, simplificación para el cumplimiento de obligaciones fiscales para personas físicas, disminución de la tasa del ISR corporativa de 30 al 28 por ciento.
El IMEF también propuso generalizar el IVA a 16 por ciento para productos destinados a la alimentación, pero con una canasta de productos de consumo estrictamente básica que esté gravada a 0 porciento del IVA, con objeto de no afectar el consumo de esos productos por las personas de menores ingresos; e integrar un Consejo Fiscal Ciudadano.
AMP