La opción que dio el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) de diferir el pago de las cuotas patronales por hasta 12, 24 o 48 meses y una tasa de interés mensual entre 1.26 y 1.82 por ciento, es un salvavidas muy caro que ningún banco cobraría, aseguró el sector privado mexicano.
El IMSS había ofrecido la opción de diferir el pago de las cuotas patronales a las mensualidades mencionadas, por lo que el importe inicial a cubrir será de 20 por ciento de la cuota patronal y de 100 por ciento de la obrera, mientras que el resto podrá diferirse hasta un máximo de 2 años, con el beneficio de que, al suscribir el convenio, la tasa de interés mensual oscila entre 1.26 por ciento y 1.82 por ciento.
En ese sentido, el vicepresidente de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), Raúl Picard, aseguró que esta medida la tomarán las empresas que realmente se encuentren con la necesidad, ya que de otra manera, ni los bancos del país cobran esos intereses.
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“Sí es un salvavidas, pero muy caro, una tasa del 1.9 por ciento, aquel que tome esa opción es porque es una verdadera necesidad y no le queda otra, pero es una tasa que ningún banco la cobraría, y si un banco la cobra, se vería muy mal hoy en día, pero en fin, es una salida, una salida cara”, aseguró.
Piden devolución de IVA
Para la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) esta opción que ofreció el IMSS es positiva, pero a la vez totalmente insuficiente, ya que la posibilidad de diferir los pagos de las cuotas obreros patronales ya se encontraba contemplada en la Ley del Seguro Social, por lo que ahora el anuncio es una tasa de interés más baja.
“En Coparmex pugnamos porque los empleos que dan el sustento a millones de familias mexicanas, sean protegidos ante la grave crisis que recaerá en sobre el sector productivo que hace marchar a la economía, pagando puntualmente sus impuestos y cotizando en el IMSS”, señaló.
Expuso que el gobierno federal debe es acelerar la devolución del IVA a no más de 20 días, así como ampliar y agilizar la disponibilidad de financiamiento de créditos con la banca de desarrollo.
“Diferir los pagos de servicios prestados por el Estado y los pagos provisionales del ISR. También puede deducir las prestaciones laborales al 100 por ciento, y poner en marcha de un programa amplio de infraestructura con fondos públicos y privados”, afirmó.
lvm