Para que las empresas puedan comenzar a desarrollar esquemas de producción adheridos a la industria 4.0 es necesario motivar la inversión destinada a la innovación y a la búsqueda de nuevas alternativas, lo que también traería mayor competitividad, aseguraron las empresas Grupo Plasma Automation (GPA) y Optimen.
La industria 4.0 es la digitalización de una industria, así como los servicios relacionados.
En entrevista con
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Ernesto Sandoval, CEO de GPA, compañía guanajuatense de robótica, indicó que muchas veces la
iniciativa privadapuede encontrarse en un estado de confort, lo que los limita a tomar riesgos y a desconocer las ventajas de dicha industria, asociada a la
optimización, es decir, a generar mejores resultados en los agentes económicos mediante el uso de la tecnología.
“Hay algo que me preocupa un poco más, para instalar tecnología 4.0 en las empresas necesitas que el empresario invierta. Si no hay inversión es difícil que tengas industria 4.0… La industria 4.0 no es un tema de moda, no es un tema de si quieres o no, es de supervivencia para las empresas que quieren ser competitivas, altamente productivas y globales”, aseveró.
Con dicha opinión coincidió Oscar Rodríguez, CEO de Optimen, empresa oriunda de Guanajuato que se dedica a desarrollar software para la industria aeroespacial, puesto que también expresó en entrevista con MILENIO que la inversión es necesaria, así como una acción colaborativa entre la iniciativa privada.
Rodríguez agregó que dicha acción conjunta aglutina los conocimientos de cada empresa, lo que les ha llevado incluso a incursionar en el mundo de la manufactura aditiva.
“El hecho con GPA, de poder coincidir con un inversionista y con un empresario de esa visión dices -oye, yo solo no lo voy a poder hacer, tú tienes un conocimiento, yo tengo otro conocimiento, ¿por qué no los unimos?… Como nos desarrollamos con dicha tecnología eso ya existe, pero el tema era cómo nos sumábamos para hacer algo”, argumentó.
Asimismo, indicó que tanto GPA como Optimen continúan trabajando de la mano en miras de impulsar en el terreno de la manufactura, tecnología en máquinas que funcionen bajo modelos predictivos y prescriptivos, con la intención de optimizar sus operaciones.
En tanto, dicha compañía de robótica realiza en promedio 60 equipos de maquinaria al año, diseñados, específicamente, para las necesidades de cada empresa y para un funcionamiento determinado, cifra de la cual 10 por ciento termina exportándose, siendo el principal mercado Estados Unidos, seguido de Canadá, mientras que Optimen también desdibuja fronteras, puesto que sus productos llegan sobre todo a la multinacional Boeing.
“Hay que dejar de hacer los procesos habituales, no vamos a ser globales ni competitivos. La actualidad nos exige que, para ser un país exportador de tecnología, exportador de productos competitivos y de alta calidad, nos pide mucho la industria 4.0”, reiteró Sandoval.
De igual forma, ambos coincidieron en que para incentivar la industria 4.0 también se requiere impulsar al talento, a través de capacitación y confianza en las personas jóvenes.
MRA