La Cámara Nacional de las Industrias Azucarera y Alcoholera (CNIAA) envió una carta al secretario de Agricultura y Desarrollo Rural, Víctor Villalobos, en la cual rechazó la satanización que se ha hecho a la industria por motivos de salud de la población.
"Por medio de ella presente los cañeros, obreros e industriales azucareros me solicitamos pudiera reiterar al gobierno federal la posición de la agroindustria de nuestra caña de azúcar en defensa de ataques injustificados por motivos de salud", señaló.
El posicionamiento se da en un contexto en el que el subsecretario de Prevención y Promoción se la Salud, Hugo López-Gatell, expusiera que el consumo de bebidas azucaradas provoca hasta 40 mil muertes al año.
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Indicó que no existe evidencia científica que indique que el azúcar de caña sea la causa de obesidad, diabetes y otras enfermedades; señaló que estas dependen de cuestiones multifactoriales como la falta de ejercicio y los malos hábitos alimenticios de la población.
Obesidad es multifactorial
La Asociación Nacional de Productores de Refrescos y Aguas Carbonatadas (ANPRAC) también se posicoonó sobre el tema y dijo que buscar culpables a un problema de salud de origen multifactorial, no abona a la solución integral de la obesidad y diabetes que enfrenta el país ni al desarrollo de una estrategia de estado.
"El consumo de azúcar de caña por habitante es de36 por ciento en los últimos 25 años, por lo cual no puede ser la causa del incremento actual que se registra en obesidad, diabetes y otras enfermedades. Además de que la azúcar de caña se ha producido y consumido país durante 500 años sin haber causado perjuicio alguno a la salud de nuestra población", aseveró la CNIAA.
Derrama económica
La organización dijo que la agroindustria de caña se ubica en 267 municipios rurales en donde habitan más de 13 millones de personas en 15 entidades. Sostuvo que la caña de azúcar representa alrededor de 2.6 por ciento del PIB manufacturero, 13.8 por ciento del PIB agropecuario y 11.6 por ciento de la industria Alimentaria.
Añadió que el sector emplea a más de medio millón de mexicanos "que no deben ser afectados injustamente", finalizó.
lvm