En los últimos años, el crecimiento inmobiliario en México ha sido notable. Sin embargo, este desarrollo acelerado ha generado preocupación entre la población, debido a un problema que está cobrando fuerza: el estrés hídrico, mismo que se refleja en la falta de suministro del líquido vital.
Con base en información de una lista elaborada por el World Resources Institute, México destaca en el lugar 24 entre 164 países con mayor estrés hídrico, situación que refleja la gravedad del problema a nivel mundial.
De acuerdo con Gustavo Tomé Velázquez, experto en el sector inmobiliario, “el estrés hídrico, definido como la falta de agua dulce suficiente para satisfacer las necesidades de la población, es causado por diversos factores, pero uno de los más notables es el aumento en el número de conjuntos habitacionales que albergan a una mayor cantidad de personas”.
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El experto asegura que, ante esta situación, las inmobiliarias han tomado conciencia de su responsabilidad y han implementado soluciones innovadoras para hacer frente a este grave problema: “estamos conscientes que en el tema del agua, todos somos corresponsables, y desde el sector inmobiliario proponemos soluciones que permitan combatir el problema de estrés hídrico que sufre el país”.
Cada vez más empresas del sector inmobiliario reconocen la importancia de ser responsables con el uso del agua, y buscan contribuir a la conservación de este recurso vital. De acuerdo con Gustavo Tomé Velázquez, estas son solo algunas de las acciones que las inmobiliarias están implementando para cuidar el estrés hídrico:
Implementación de tecnologías eficientes. Las inmobiliarias están utilizando tecnologías avanzadas en sus construcciones, como sistemas de riego inteligentes, grifos y duchas de bajo flujo, inodoros de doble descarga y electrodomésticos eficientes en el consumo de agua. Estas medidas ayudan a reducir el consumo de agua en los edificios y viviendas.
Uso de fuentes alternativas de agua. Algunas inmobiliarias están implementando sistemas de recolección y reutilización de agua pluvial, así como la utilización de aguas grises (agua residual generada en actividades domésticas) para riego de áreas verdes u otros usos no potables. Esto reduce la dependencia de las fuentes de agua convencionales.
Sensibilización y educación. Las inmobiliarias están promoviendo la conciencia sobre la importancia de la conservación del agua entre sus clientes y residentes. A través de programas de educación, campañas de sensibilización y la entrega de material informativo, se busca fomentar prácticas responsables de uso del agua, como reportar fugas, evitar el desperdicio y adoptar hábitos de consumo consciente.
Desde la perspectiva del sector inmobiliario, el cuidado del agua no solo es una responsabilidad ambiental, sino también una oportunidad para la innovación y la diferenciación. Las inmobiliarias que adoptan prácticas sostenibles y eficientes en el manejo del agua destacan como líderes en el mercado, generando confianza entre los compradores y promoviendo un estilo de vida sustentable.
Gustavo Tomé Velázquez agrega que las inmobiliarias están desempeñando un papel activo en la protección y cuidado del recurso hídrico. A través de la adopción de tecnologías eficientes, programas de educación ambiental y proyectos de reforestación, están contribuyendo a mitigar el estrés hídrico y promover la sostenibilidad.
“Este compromiso demuestra que el sector inmobiliario no solo se preocupa por el desarrollo urbano, sino también por el bienestar de las comunidades y el medio ambiente.”
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