Abigail Disney acusó a la compañía de entretenimiento, de la cual su abuelo fue cofundador, de contribuir al aumento de la desigualdad económica, al pagarle a su director ejecutivo 65.7 millones de dólares (mdd) el año pasado. En una serie de tuits, que amplían los comentarios que hizo en una conferencia, la heredera y documentalista argumentó que ese nivel de remuneración de los ejecutivos tiene “un efecto corrosivo en la sociedad”.
Bob Iger dirige Walt Disney de forma brillante desde que se convirtió en CEO en 2005, dijo, pero la brecha entre su ingreso y el de los trabajadores de menor salario de la compañía “viola nuestro sentido innato de justicia; es imposible no estremecerse”.
Su perspectiva se formó al hablar con los empleados que ganan el salario mínimo de 15 dólares por hora en el parque de diversiones Disneyland en California, y tienen dificultades para pagar las facturas médicas. Iger podría darle un aumento a cada empleado de 15% “y aun así quedarse con 10 mdd”, argumentó.
El tema es delicado para el Consejo de Administración de Disney, que perdió por poco un voto de consulta sobre la compensación a los ejecutivos en la reunión anual del año pasado, con 52% de los votos en contra de la resolución. Este año, después de que el Comité de Compensación informó que introdujo criterios de rendimiento más rigurosos, se aprobó una moción similar.
La compañía respondió a los comentarios de Abigail Disney diciendo que “hizo inversiones históricas para ampliar el potencial de ingresos y la movilidad ascendente de nuestros trabajadores”, incluyendo un salario inicial por hora de 15 dólares en Disneyland y una iniciativa de 150 mdd que ofrece a los empleados por hora la oportunidad de obtener un título universitario o vocacional gratuito.
La compensación de Iger se basó en un desempeño de 90%, agregó, y en que él “entregó un valor excepcional para los accionistas”, con el precio de las acciones que subió de 24 a 132 dólares desde 2005.
El Dato.26.3mdd
En acciones restringidas fue la compensación de Bob Iger por la adquisición de Century Fox.
Abigail Disney respondió que “ignorar las críticas sobre el bajo sueldo de los trabajadores de la empresa, al decir que pagan más que el salario mínimo federal y que brindan oportunidades para la educación, es escabullirse. Todos sabemos que el mínimo federal es demasiado bajo para vivir”. Iger supervisó las adquisiciones lucrativas de Pixar, Marvel y Lucasfilm, y su compensación el año pasado incluyó 26.3 mdd en acciones restringidas, para recompensarlo por la adquisición de los negocios de entretenimiento de 21st Century Fox.
Esto lo convirtió en uno de los cinco CEO mejor pagados en Estados Unidos (EU) en 2018, de acuerdo con un estudio reciente de Equilar, que calculó que ganaba 1,424 veces más que el empleado promedio de Disney. El año pasado entró en vigor el requisito de la Comisión de Bolsa y Valores de EU (SEC, por sus siglas en inglés) de que cada compañía revelara el sueldo de su CEO como un múltiplo de la remuneración de su empleado promedio, lo que provocó un nuevo escrutinio sobre los premios a los ejecutivos y un debate más amplio sobre si el capitalismo necesita una reforma.
En un estudio de Equilar sobre Las 100 principales empresas de EU en 2018, se encontró que el CEO promedio ganó 254 veces más que su empleado promedio. En investigaciones anteriores del Instituto de Política Económica se encontró que el múltiplo estaba por debajo de 30 en la década de 1960, y que alcanzó su punto máximo por encima de 350 veces durante el auge de las puntocom a finales de la década de 1990.
Courtney Yu, directora de investigación de Equilar, dijo que las revelaciones iniciales de los múltiplos de pago del CEO se encontraron con “más preguntas que indignación” entre los inversores. “Si bien no hemos oído que la relación de sueldo del CEO tenga un impacto en una votación para reducción de sueldo, los Comités de Compensación y los equipos de Recursos Humanos tienen en cuenta esta divulgación en el segundo año que se publica”.
Abigail Disney, nieta de Roy Disney, dijo que no tenía tantas acciones en la compañía y que no habla por el resto de su familia. Autodenominada “de izquierda, de la ciudad de Nueva York, del tipo intelectual”, se convirtió en una activista para impulsar impuestos más altos para las personas más ricas de Estados Unidos. La compañía extendió el contrato de Bob Iger hasta diciembre de 2021.