Hace 10 años Fernando Pérez Castro fundó La Lomita, una de las vinícolas que formó parte de la nueva generación de productores mexicanos que hoy se encuentran liderando la industria. Tras una década de trabajo, el también presidente de Provino Baja California, ha conquistado no solo el paladar de nacionales y extranjeros, ahora será la empresa mexicana la única que producirá los vinos que venderá la cadena de hamburguesas premium, Shake Shack en México.
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“Hicimos muchos viajes a México mientras veíamos el menú y decidiendo el menú final. El equipo junto con el de Toks probamos muchísimos. Queríamos un viñedo orgánico para que el vino estuviera en línea con nuestra filosofía de ingredientes premium y que hiciera perfecto maridaje con nuestras hamburguesas. Pensamos que este es el vino perfecto que le queda a nuestro menú”, expuso para MILENIO Randy Garutti, CEO de la estadunidense.
La vinícola de Ensenada, Baja California, hizo una primera añada (cosecha de un año) para la estadunidense, tanto de vino tinto como de blanco, hechos en exclusiva. La idea, dijo, es que sea una alianza que dure mucho tiempo y estén presentes en todas las unidades que abrirán.
“Nos parece magnífico que cadenas de fastfood de alta calidad ya se establezcan en el país para que conozcamos cómo se come con alimentos básicos pero ingredientes de alta calidad, una de las razones por las que el vino tiene un lugar ahí”, dijo en entrevista Pérez Castro.
De acuerdo con el directivo de Shake Shack, esta es la primera ocasión en que la marca hace un proyecto como éste. No solo el producto será nacional, pues el diseño de las etiquetas corrió a cargo del artista Jorge Tellaeche, quien ya ha participado con la vinícola en otras ocasiones.
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“El auge del vino mexicano ya dejó de ser moda y se ha convertido poco a poco en una costumbre, sobre todo de una generación entre 25 y 45 años de comer con vino, algo que nos beneficia a todos los productores, algo que han volteado a ver restaurantes y cadenas, que nos han dado la oportunidad de incorporarnos e incursionar con ellos”, expuso el fundador de La Lomita.
Éste, expuso Garutti, será uno de los diferenciales que tendrá la empresa con otras cadenas de hamburguesas, pues sostuvo que no quieren ser una empresa gigante de comida rápida que siempre hace lo mismo, por lo que los detalles y las alianzas con productores locales serán un punto importante para su crecimiento.
Además, indicó que la empresa no descarta la posibilidad de que el vino mexicano pueda incursionar en otros mercados, luego de esta activación en el país.
“Parte de las mejores cosas que pasan en Shake Shack al incursionar en el mundo es que aprendemos sobre ingredientes nuevos y otros productores, muchas veces los llevamos a Estados Unidos. Hay muchas cosas así que esperamos hacer•, finalizó.
Hace 10 años Fernando Pérez Castro fundó La Lomita, una de las vinícolas que formó parte de la nueva generación de productores mexicanos que hoy se encuentran liderando la industria. Tras una década de trabajo, el también presidente de Provino Baja California, ha conquistado no solo el paladar de nacionales y extranjeros, ahora será la empresa mexicana la única que producirá los vinos que venderá la cadena de hamburguesas premium, Shake Shack en México.
“Hicimos muchos viajes a México mientras veíamos el menú y decidiendo el menú final. El equipo junto con el de Toks probamos muchísimos. Queríamos un viñedo orgánico para que el vino estuviera en línea con nuestra filosofía de ingredientes premium y que hiciera perfecto maridaje con nuestras hamburguesas. Pensamos que este es el vino perfecto que le queda a nuestro menú”, expuso para MILENIO Randy Garutti, CEO de la estadunidense.
La vinícola de Ensenada, Baja California, hizo una primera añada (cosecha de un año) para la estadunidense, tanto de vino tinto como de blanco, hechos en exclusiva. La idea, dijo, es que sea una alianza que dure mucho tiempo y estén presentes en todas las unidades que abrirán.
“Nos parece magnífico que cadenas de fastfood de alta calidad ya se establezcan en el país para que conozcamos cómo se come con alimentos básicos pero ingredientes de alta calidad, una de las razones por las que el vino tiene un lugar ahí”, dijo en entrevista Pérez Castro.
De acuerdo con el directivo de Shake Shack, esta es la primera ocasión en que la marca hace un proyecto como éste. No solo el producto será nacional, pues el diseño de las etiquetas corrió a cargo del artista Jorge Tellaeche, quien ya ha participado con la vinícola en otras ocasiones.
“El auge del vino mexicano ya dejó de ser moda y se ha convertido poco a poco en una costumbre, sobre todo de una generación entre 25 y 45 años de comer con vino, algo que nos beneficia a todos los productores, algo que han volteado a ver restaurantes y cadenas, que nos han dado la oportunidad de incorporarnos e incursionar con ellos”, expuso el fundador de La Lomita.
Éste, expuso Garutti, será uno de los diferenciales que tendrá la empresa con otras cadenas de hamburguesas, pues sostuvo que no quieren ser una empresa gigante de comida rápida que siempre hace lo mismo, por lo que los detalles y las alianzas con productores locales serán un punto importante para su crecimiento.
Además, indicó que la empresa no descarta la posibilidad de que el vino mexicano pueda incursionar en otros mercados, luego de esta activación en el país.
“Parte de las mejores cosas que pasan en Shake Shack al incursionar en el mundo es que aprendemos sobre ingredientes nuevos y otros productores, muchas veces los llevamos a Estados Unidos. Hay muchas cosas así que esperamos hacer•, finalizó.
lvm