Mississippi se convertirá en el último estado de Estados Unidos en aprobar igualdad de paga para hombres y mujeres, el gobernador republicano Tate Reeves firmó la medida, que entrará en vigencia el 1 de julio.
Las autoridades federales aprobaron en 1963 la ley que consagra igualdad de paga por trabajo igual, pero Mississippi era el único estado que quedaba si una ley propia desde que Alabama aprobó la suya en el 2019.
Según la ley, un trabajador tiene dos años para presentar una demanda si detecta una discrepancia inapropiada en la compensación salarial entre hombres y mujeres.
Si la demanda es exitosa, el empleador tendrá que aumentarle el sueldo a la persona menos pagada en vez de bajarle el sueldo a la mejor remunerada, afirmó Angela Cockerham, la legisladora que impulsó la medida.
Según la ley, toda firma con al menos cinco empleados debe pagarle igual a hombres y mujeres que trabajen a tiempo completo en cargos que exigen “talentos, educación, esfuerzo y responsabilidad” iguales y que se realicen “bajo condiciones laborales similares”.
Hay excepciones; por ejemplo, por veteranía, méritos, cantidad o calidad del trabajo o “cualquier factor que no sea el sexo”, inclusive la remuneración pasada o si hubo competencia en la contratación.
Un estudio hecho en el 2017 por la Unidad de Investigaciones de la Universidad de Mississippi mostró que las mujeres ganan 27 por ciento menos que los hombres en Mississippi, comparado con un promedio nacional de 19 por ciento.
El estudio dice que parte de la causa puede ser porque hombres y mujeres trabajan en empleos distintos, pero la brecha inexplicada se sitúa en 18 por ciento en Mississippi y en 15 por ciento a nivel nacional.
MRA