La ruptura en las cadenas de suministro a escala global como consecuencia de la pandemia, hizo que la automotriz japonesa Mitsubishi Motors comience a robustecer sus esquemas de proveeduría en México; si bien esto apenas comienza, Jorge Vallejo, CEO de la firma en el país, aseguró que el panorama será diferente en un par de años.
En entrevista con MILENIO, Vallejo indicó que 2021 fue un año complicado y de dificultades para el sector automotriz, así como para la mayoría de las industrias y resaltó la falta de abastecimiento de semiconductores que ha permeado en el ensamblado de vehículos en todo el mundo.
Al haber escasez no sólo de este insumo sino también de materia prima y algunas autopartes, la compañía nipona encaminó sus acciones para mejorar el flujo en su cadena de valor en el país, lo que le llevó a relocalizar insumos tanto en México como en Asia.
Pese a que se tiene dependencia del surtimiento asiático, la intención es que en algún momento la cadena de suministro en México comience a marchar de forma independiente.
“Una inversión adicional se hizo en esas entidades (en Asia) y nosotros también, haciendo lo propio en una localización en México de ciertos componentes, como aceites, filtros, una localización que hoy día estamos compaginando entre lo que se entrega y se surte de allá, con lo que surte de acá", dijo el directivo.
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“Ese fue solamente un parteaguas, porque lo que nosotros estamos buscando es que esa localización en México siga creciendo para que ya en un momento dado no solamente compensemos sino también logremos remplazar un poco del surtimiento que se tiene de Asia”, añadió.
Agregó que en miras de pasar del offshoring al nearshoring, es decir, que de tener alejados a los actores de las cadenas de valor estos puedan estar localizados más estrechamente, Mitsubishi ya cuenta con una oficina enfocada a la proveeduría en México.
Esta oficina de procurement tiene el objetivo de encontrar aquellos productos en el país que puedan adherirse a la cadena de suministro de la firma nipona, de tal forma que Vallejo prevé que para mediados de este año, ya se contará con datos concretos de los proveedores que podrían añadirse.
“Está buscando qué productos podemos aprovechar, gestionar la homologación, verificar la certificación de calidad del producto y en consecuencia tocar base con Japón para que nos permitan utilizarlo”, indicó.
Resaltó que esta oficina es el primer paso para robustecer su cadena de suministro en el país, que a su vez traería la oportunidad de comenzar a exportar esta proveeduría hacia otros mercados en América Latina.
“Esa localización debe de ser así, fortalecer la cadena de suministro de México hacia el exterior. Habrá que surtir primeramente al mercado doméstico, eso es clave, pero una vez que se surta se puede abrir la puerta para exportar a otros mercados, ya sea Colombia, Brasil y Chile”, añadió.
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Abasto, el reto para este año
Así como sucedió el año pasado, el CEO de Mitsubishi en México considera que el principal reto en 2022 para los agentes del sector será el abasto. Ante este escenario, resaltó que el producto “es el rey”, más tomando en cuenta que cada vez observan una mayor demanda por parte del mercado.
Ejemplificó que en noviembre de 2021, la compañía entregó una flota de 700 unidades destinadas a renta diaria, lo que les ha implicado diseñar estrategias para hacerle frente a la demanda actual.
“Estamos haciendo una planeación muy anticipada para obviamente poder seguir surtiendo estas flotas y el nombre del juego se llama producto”, subrayó.
Eficiencia, pieza clave
Al reto del abasto se suma el de las presiones inflacionarias, que les ha llevado a orientar esfuerzos en retener el alza en los productos, para que no termine afectando en costos a los consumidores finales. Ante ello, la compañía ha buscado incrementar su eficiencia y con ello, abaratar sus costos de operación en México.
Durante 2021, Mitsubishi vendió en el país 17 mil 872 vehículos. De estos, 15 mil 221 llegaron de Tailandia; 2 mil 151 de Indonesia y 500 de Japón, de tal forma que el aumento en los precios de los fletes marítimos ha sido otro factor que ha sumado “estrés” al panorama actual.
Ante ello, una de las estrategias que impulsaron fue cambiar la recepción de su producto del puerto de Mazatlán a Lázaro Cárdenas, evitando así el uso de ferrocarril para transportar los vehículos que llegan al mercado mexicano.
“Tenemos que abaratar. No podemos simplemente impactar el mercado con crecimiento en el precio. Buscamos eficiencia diaria y abaratar nuestros costos. Yo creo que eso es uno de los puntos importantes que nos han permitido seguir manteniendo los precios competitivos con estos volúmenes incrementales (de la inflación)”, dijo finalmente Vallejo.
AMP