Las inversiones que traerá la relocalización de empresas y fábricas en México se van a mantener muy sólidas en los próximos años debido a las características del país, no solo geográficas, sino sociodemográficas que lo hacen el gran socio de Estados Unidos, aunque el flujo de capitales se dará en su mayor parte después de las elecciones, aseguró Fernando Lerdo de Tejada, vocero del consorcio Nearshoring Consulting Services & Solutions (NCSS).
Con la idea de aprovechar el efecto neto del nearshoring en México, Banorte estimó en 68 mil 800 millones de dólares que ocho firmas de diversas especialidades se unieron para crear NCSS, consultora que ayudará a las empresas globales para su “aterrizaje suave” en México.
“Ahora las empresas extranjeras buscan mejores oportunidades para producir con calidad y más barato, y somos aquí en México un activo para empresas individuales, pero también para las empresas mexicanas que pueden tener un área de oportunidad al generar insumos”, señaló Natividad González Parás, ex gobernador de Nuevo León y socio de NCSS.
González Parás destacó que el nearshoring representa un reto que obliga a ciertos sectores de la sociedad a que se integren de forma armónica. De acuerdo con NCSS, las grandes cadenas de inversión que desean relocalizarse en el país serán muy positivas, ya que si las empresas desean entrar con sus productos a Estados Unidos, deben buscar los lugares ideales para hacerlo, como son hoy las ciudades ubicadas en la frontera norte como Reynosa, Monterrey, Juárez, Tijuana.
Aunque también prevé que las empresas que apuesten por, además, aprovechar el mercado interno pueden tener un destino ideal en entidades como Querétaro, Ciudad de México, Puebla y Jalisco serán lo mejor.
De acuerdo con datos de Banorte, en los próximos cinco años, de manera inercial, se darán exportaciones no petroleras de México a Estados Unidos por un monto de 35 mil 200 millones de dólares.
El nearshoring atraerá inversiones por 33 mil 600 millones de dólares. Por lo cual, el efecto neto de la relocalización de empresas alcanzaría hasta 68 mil 800 millones de dólares. Entre los destinos que NCSS destaca como principales destinos de exportaciones serán: Estados Unidos con 466 mil millones de dólares; Canadá con 18 mil millones de dólares y China con 9 mil 200 millones de dólares.
En tanto que los sectores con mayor potencial de exportación serán el de automóviles, computadoras, autopartes, vehículos pesados, alambres y cables.
Suma de especialidades
NCSS está integrado por los despachos legales Degal Abogados y Jáuregui y del Valle; las financieras Orange Investments y Latam Finance; la firma de lobbying y comunicación, Estrategia Total; la empresa de innovación y tecnología, Inncom; así como las desarrolladora queretana, Construcción de Espacios Industriales y Habitacionales, Ceih; y la estadunidense Dextro, experta en gestión y construcción de redes y coaliciones.
“México es una economía rica, diversa y en auge, que ofrece múltiples oportunidades para el crecimiento de largo plazo de las empresas e industrias que buscan establecerse por primera vez o expandir sus activos”, señala NCSS.
El consorcio NCSS estará enfocado en relocalización de empresas basados en tres rubros: las nuevas inversiones, empresas que desean reinvertir en el país para planes de expansión; y las compañías que desean crecer sus negocios para aprovechar nuevas políticas o beneficios.
“El grupo que tenemos de empresas que se está integrando agrupa a gente que conoce el mercado y está comprometida en cómo aprovechar este fenómeno y llevar a México por un buen camino”, explicó Frineé Pedroza, por parte de Estrategia, socio de NCSS.
No obstante, reconocen que el país necesita fortificar algunos aspectos como la infraestructura energética y la provisión de agua. Edgar Gómez, de Latam Finance y socio del nuevo conglomerado, puntualizó que el abastecimiento energético necesario para las empresas que llegarán será de grandes dimensiones.
“Hay varias soluciones que se han planteado para abasto energético y de agua, no es un problema que no tenga solución. Lo que sí creo es que el nearshoring no se va a dar si no hacemos algo. Si nos quedamos como estamos va a ser muy difícil que se aproveche”, enfatizó Gómez.
Es necesario crear esquemas que generen inversiones de calidad, así como crear empleos calificados y no sólo mano de obra barata para manufactura, aseguró el miembro de NSCC, Jaime Parada.
"Queremos empleo de calidad. Hay una gran oportunidad de atraer inversiones en el campo de manufacturas sofisticadas".
Agregó que el nearshoring es una oportunidad única en su historia y que no se repetirá en los próximos 10 años, ya que es una ventana de oportunidad limitada para atraer de manera importante empresas que generen empleos de calidad para los ciudadanos.
Sin embargo, dijo que el panorama electoral que vive el país no se interpondrá ante las inversiones que se produzcan en relación al nearshoring.
"No pensamos que lo político sea un factor relevante que pueda significar la limitación a este flujo importantísimo de inversión".
EDD