El nearshoring representa una “oportunidad histórica” para el desarrollo de México, alcanzando un crecimiento de hasta 8 por ciento en el Producto Interno Bruto (PIB) en los siguientes seis años, de acuerdo con Santander.
De acuerdo con el estudio “Nearshoring Data Monitor” elaborado por el banco, el país podría pasar de representar 14 por ciento de las importaciones de Estados Unidos a 20 por ciento para el año 2030, lo que abre una oportunidad sin precedentes que requiere de un soporte bancario de gran alcance.
Destacó que dentro de las principales industrias ligadas al nearshoring, México ya tiene relevancia como exportador, como en la automotriz y autopartes, línea blanca y ciertos artículos electrónicos como televisores.
Sin embargo, subrayó que el potencial es enorme para que otros sectores crezcan de forma acelerada, como en la industria aeronáutica, equipo médico, ropa y artículos deportivos
Además, la entidad financiera comentó que Estados Unidos es el país que mayor cantidad de bienes compra de todo el mundo, provenientes principalmente de China con 17 por ciento del total y México con 14 por ciento, por lo que el proceso de reubicación de fábricas desde China hacia México u otras regiones para abastecer al mercado de Estados Unidos, es una tendencia sin precedentes que México debe aprovechar.
Por lo que especialistas de la firma financiera, apuntan que el efecto del nearshoring, si bien implica una mayor demanda de servicios financieros entre las empresas de gran calado que relocalizan sus operaciones, también implica una mayor demanda por servicios financieros por parte de cientos de pequeñas y medianas empresas (PyMEs).
Ante ese panorama, la firma financiera indicó que esta reforzando las tareas de su International Desk, así como su estructura de apoyo a empresas interesadas en invertir en México, que cuenta con presencia en 15 países y más de 10 años de proveyendo soluciones financieras para empresas, PyMEs y personas físicas que busquen aprovechar esta oportunidad.
HCM