A pesar de que la generación de empleo sigue creciendo, superando los niveles previos a la pandemia, también es necesario revisar y trabajar porque se mejore la calidad de los mismos, destacó el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (Ceesp).
“No hay duda de lo benéfico que resulta la creación de empleos, pero de igual importancia o más quizá, es su calidad. El acceso a los servicios de salud y el nivel salarial son sin duda factores determinantes de la calidad del empleo”, expuso.
Destacaron que, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), elaborada por el Inegi, muestran que en el primer mes del año la población ocupada sumó 58.9 millones de personas, 553 mil más que en igual mes del año pasado.
“Si bien este fue uno de sus menores avances anuales, ya supera en 3.5 millones de ocupados su nivel prepandemia, lo que significa que en los últimos tres años se generaron un total de casi 1.2 millones de puestos de trabajo por año”, refirió.
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Pero remarcó que los mismos datos de la ENOE indican que, del total del aumento en el número de ocupados después de la pandemia, 10.9 millones de personas lograron ocuparse con un ingreso de hasta un salario mínimo, mientras que, por el contrario, la ocupación de quienes tienen ingresos superiores a un salario mínimo se redujo en 8.9 millones de personas.
A su interior, el segmento de ocupados con ingresos de más de uno hasta 2 salarios mínimos disminuyó en 1.8 millones. En el de más de 2 y hasta 3 la baja fue de 3.8 millones de personas, en el de más de 3 hasta 5 hubo una disminución de 2.4 millones en tanto que en el de más de cinco salarios la baja fue de casi un millón.
Afirman que otro indicador que resalta la precarización del mercado laboral es la tasa de condiciones críticas de ocupación, que representa el “porcentaje de la población ocupada que se encuentra trabajando menos de 35 horas a la semana por razones de mercado, más la que trabaja más de 35 horas semanales con ingresos mensuales inferiores al salario mínimo y la que labora más de 48 horas semanales ganando hasta dos salarios mínimos”, que en enero fue equivalente al 34.1 por ciento de la población ocupada, lo que significa un aumento de 11 puntos porcentuales respecto a su nivel prepandemia.
“Esto quiere decir que actualmente son 20.1 millones de personas las que se encuentran en esta condición laboral cuando en febrero del 2020 sumaban 12.7 millones”, remarcó.