Jesús Seade, candidato de México para dirigir a la Organización Mundial del Comercio (OMC) sostuvo que de ser electo como el nuevo director general retomará temas que han estado estancados y aquellos urgentes como las negociaciones sobre las reglas del comercio relacionado a lo electrónico, así como el agotamiento de los océanos por la pesca intensiva, pues afirmó que el organismo requiere de un líder fuerte.
"Creo que la gente está de acuerdo en que necesitamos una personalidad contundente" para abordar los cuellos de botella, dijo Seade a Reuters en una entrevista la semana pasada en la que describió ideas para reparar el mecanismo de resolución de disputas de la OMC, bloqueado por Estados Unidos.
"La OMC está en una situación realmente desesperada, una situación difícil, se necesita la mejor y más adecuada persona para desenterrarla", dijo. "No estamos en una situación en la que podamos tener algún tipo de curva de aprendizaje", agregó.
Insistió que sería respetuoso de la naturaleza del grupo, pero que presionaría a los países para que resuelvan las diferencias, en contraste con la moderación que, en un extremo, dijo, corría el riesgo de reducir al director general a un "mayordomo digno, asegurándose de que las salas de reuniones estén disponibles".
La OMC quedará sin líder el 31 de agosto, luego de que el actual director general, Roberto Acevedo, anunció que dimitiría un año antes de que acabe su gestión. El organismo apunta a elegir un nuevo jefe para noviembre. Seade, actualmente subsecretario de Relaciones Exteriores de México para América del Norte, está entre los ocho candidatos.
La OMC se encuentra quizás en la peor crisis de sus 25 años de existencia, golpeada por la desconfianza de la administración de Donald Trump hacia los organismos multilaterales, la fricción entre Estados Unidos y China y el colapso de su sistema de resolución de controversias.
Seade, un subdirector general fundador de la OMC que también ha trabajado en el Fondo Monetario Internacional, dijo que la crisis era tan grave que ahora había la oportunidad de impulsar a la organización a actuar.
Agregó que una decisión rápida sobre el liderazgo ayudaría a concluir las negociaciones de pesca y otras con miras a iniciar nuevas conversaciones el próximo año sobre temas como la agricultura y dar tiempo para organizar una demorada conferencia ministerial en 2021.
Para restaurar la fe de Estados Unidos en el mecanismo de resolución de disputas que Washington acusa de extralimitación, dijo que los miembros podrían considerar un sistema de supervisión más fuerte para asegurarse de que el poderoso órgano de apelación no se desvíe más allá de su mandato.
MRA