Cada mes cerca de 150 mil marinos deben de ser cambiados de lugar, hacia y desde los buques que operan, operaciones que se han complicado ante la pandemia mundial generada por el covid 19, por lo que la Organización Marítima Internacional (OMI) acordó nuevos protocolos para garantizar que los cambios de tripulación de los buques puedan tener lugar de forma segura durante la emergencia sanitaria.
La OMI destacó que el transporte marítimo y la gente de mar son vitales para las cadenas de suministro mundiales. Debido a las restricciones de covid-19, un gran número de marinos están teniendo que ampliar su servicio a bordo de los buques después de muchos meses en el mar, sin poder ser reemplazados o repatriados después de largos períodos de servicio.
Las tripulaciones no han podido cambiar debido a que gran parte de los vuelos han sido cancelados, lo cual impide el desplazamiento de los relevos de un punto a otro y por otra parte, algunos gobiernos tampoco están permitiendo el relevo de tripulaciones, informó el organismo internacional en un comunicado.
En los buques más grande se encuentran tripulaciones de 15 o 17 personas únicamente y es gente que lleva en altamar un tiempo prolongado, entre cuatro o cinco meses de manera continua.
Esto se considera insostenible, tanto para la seguridad y el bienestar de la gente de mar como para el funcionamiento seguro del comercio marítimo, refirió la OMI.
La necesidad de que los buques cambien de tripulación y de que los marinos vuelvan a casa al final de sus períodos de servicio han surgido como dos de los mayores retos del transporte marítimo como resultado de la pandemia de covid-19.
Los protocolos fueron elaborados por una amplia muestra representativa de asociaciones industriales mundiales que representan a diversos sectores del sector del transporte marítimos. Son medidas y procedimientos generales destinados a garantizar que los cambios de tripulación de los buques puedan tener lugar de forma segura durante la pandemia de covid-19.
Estas nuevas medidas se refieren a las funciones de las compañías navieras, los agentes y los representantes, incluidas las agencias de tripulación y los marinos, y se extienden a los puertos marítimos, los aeropuertos y las líneas aéreas que participan en las operaciones de viaje para los cambios de tripulación de los buques.
Estos protocolos son un llamado a los Gobiernos y sus autoridades nacionales competentes hagan todo lo posible para permitir que se produzcan cambios en la tripulación, refirió la OMI.
srgs