Ante la iniciativa presidencial para eliminar la subcontratación o el outsourcing, la Asociación Mexicana de Empresas de Capital Humano (AMECH), señaló que es necesario que haya un periodo transitorio sobre la deducibilidad de las facturas, inclusión del trabajo temporal y los servicios especializados puedan prestarse en las actividades preponderantes o contenidas en el objeto social de las empresas.
De acuerdo con el presidente de la AMECH, Héctor Márquez Pitol, la aprobación de la reforma no significaría que las empresas de subcontratación se vayan del país, aunque si se perdería un importante porcentaje de la facturación por la reducción de sus actividades.
De acuerdo con el INEGI, resaltó, en el país 4.6 millones de personas trabajan vía outsourcing y si se acaba está modalidad, 30 por ciento de las empresas que encuestaron, las contratarían vía directa, sin cambios en el sueldo y prestaciones; 60 por ciento lo haría por honorarios, asimilados de salarios o derechos de autor y usarían cualquier mecanismo para no dar seguridad social; y el otro 10 por ciento migraría a esquemas peores donde no hay ni pagos de ISR.
El sueldo promedio de estos trabajadores (outsourcing e insoutrcing) ante el IMSS, resaltó, era de 12 mil 240 pesos mensuales hasta diciembre, de manera que en total se pagan 56 mil 304 millones de pesos en salarios. Para una persona con ese sueldo, dijo, la carga patronal es de casi 30 por ciento, alrededor de 17 mil millones de pesos mensuales, más el 2.5 por ciento del ISN, serían alrededor de 2 mil millones de pesos mensuales.
“De no modificarse la iniciativa presidencial y 60 por ciento de los trabajadores se van a esquemas donde no hay seguridad, ese porcentaje de los 17 mil millones no llegarían al IMSS”.
En conferencia de prensa detalló que la iniciativa que envió el presidente Andrés Manuel López Obrador en noviembre pasado no será la misma que se dictaminará. “Se está esperando una nueva iniciativa, no se ha enviado del gobierno federal a la Cámara de Diputados, solo ha habido sesiones importantes en el tema del PTU y se están terminado de revisar otros puntos como el del empleo temporal o eventual”.
De mantenerse la iniciativa como está, expresó, la AMECH seguirá trabajando y ayudando a las empresas que no tendrán el capital humano, sobre todo, porque sus fuentes de reclutamiento son muy valiosas. En la reforma, apuntó, debe mantenerse el combate a la evasión fiscal, sobre todo, en el subregistro de sueldos y pagos a través de esquemas que evaden el pago de ISR o el IMSS.
Márquez Pitol recordó que más del 60 por ciento de las empresas que usan los esquemas de subcontratación son microempresas, por lo que es importante darles la opción de subcontratar de manera formal, de lo contrario, utilizarían a la gente y les pagarían en efectivo o por honorarios.
Al respecto, Pablo Lezama, recordó que la subcontratación es legítima y por ello de probarse la reforma es necesario un periodo transitorio para cambiar la operación de las empresas, según la nueva ley.
A la fecha, la AMECH concentra más de 100 razones sociales especializadas en el reclutamiento del personal, sin embargo, la Secretaría del Trabajo tiene registradas a 500 empresas, pero hay otras que operan en la oscuridad, “no por prohibir el outsourcing se acaba el problema, porque solo se le prohibiría a las empresas que legalmente lo hacen y a la que han reconocido que esa es su actividad preponderante, todas aquellas que están en lo oscurito lo seguirán haciendo”.
En 2019 las empresas de la AMECH totalizaron 170 mil empleos terciarizados en promedio, pero debido al carácter de “primer empleo” y la temporalidad de estos, se estima una generación de 600 mil empleos al año. Los 28 grupos de empresas realizan aportaciones totales al Infornavit mil 415 millones de pesos y 3 mil 340 millones Seguro Social.
MMCF