La pandemia ocasionó que las oficinas de gobierno como Sener, CRE, ASEA laboraran de manera parcial o intermitentemente en casi un año, lo cual ha originado lentitud en el otorgamiento de permisos para nuevas estaciones de servicio de gas natural vehicular, así como construcción de infraestructura, lo cual tiene “en la congeladora” inversiones por 500 millones de dólares.
Andrés Bayona Insignares, presidente de la Asociación Mexicana de Gas Natural Vehicular (AMGNV), explicó que justamente la crisis energética que se vivió la semana pasada hizo evidente la necesidad de que la Sener, CRE y Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente (ASEA), agilice las autorizaciones que están pendientes y que tienen que ver con la ampliación de la infraestructura de gas natural vehicular y comprimido, así como licuado y los servicios asociados.
- Te recomendamos La disminución de gas natural lleva a industria a paro técnico Política
Dijo que actualmente existen alrededor de 500 millones de dólares de inversión detenidos porque las diferentes instancias y encargadas de otorgar permisos están cerradas o laborando parcialmente.
El empresario indicó que el abasto fue parcial y en este momento ya se normalizó, sin embargo, el sector enfrenta la lentitud en el otorgamiento de permisos por parte de la Comisión Reguladora de Energía para nuevas estaciones de servicio, o bien, infraestructura en general.
Explicó que, desde el inicio de la pandemia, la CRE, Sener y ASEA han trabajado parcialmente o intermitentemente, por lo que hay un rezago en el otorgamiento de nuevos permisos.
“Hay infraestructura que no se ha podido hacer por falta de permisos, no sólo son los centros de servicio, sino los talleres, almacenamiento y la compra de autobuses”, añadió el empresario.
Refirió que se deben de emitir medidas de excepción en la Sener, CRE y ASEA, que permitan agilizar las autorizaciones para la ampliación de la infraestructura de gas natural vehicular, gas natural comprimido, licuado y los servicios asociados.
Mencionó que para finales de este año esperan alcanzar las 107 estaciones públicas de GNV, con lo cual duplicarán la infraestructura que se encontraba operando a finales de 2020, acompañado de un crecimiento similar de los vehículos usuarios, principalmente autobuses de transporte masivo, tractocamiones, taxis y vehículos de reparto.
Actualmente, existen unas 57 estaciones de servicio de GNV y 16 estaciones de compresión GNV, para este año se estima sumar 21 de estaciones de compresión GNV y 107 estaciones de servicio GNV.
Bayona expresó que es necesario una revisión integral de la política de abasto de combustibles, incluido el gas natural, que garantice la estabilidad y seguridad en el suministro, incluyendo la producción nacional, importación, almacenamiento y distribución.
Por su parte, Luis Felipe Echavarría, ex presidente de la AMGNV, mencionó que este tipo de crisis energética como la que se presentó la semana pasada y que se debió a un evento coyuntural como fueron las fuertes nevadas que se registraron en Texas y en Nuevo León, deja más en evidencia la oportunidad de que el país le apueste a una canasta más integrada que incluya al gas natural vehicular, donde los ahorros son genuinos y necesarios para el transporte de carga, de reparto y urbano, así como particular.
Enfatizó que se requiere de un plan integral para impulsar el gas natural vehicular en el país.