La pandemia de covid-19 ha impactado los hábitos de consumo en el mundo, y México no es la excepción, ya que más de 20 por ciento de los compradores estima que planea modificar su ingesta de alimentos cárnicos y de origen vegetal, señaló Graciana Méndez, senior Regional Insights Analyst en América Latina para Mintel.
En el marco del foro "El Consumidor mexicano en la nueva normalidad", realizada por Food Tech México, sostuvo que 21 por ciento de los compradores mexicanos está de acuerdo con que la pandemia comprueba que los mexicanos necesitan ingerir menos alimentos de origen animal.
Destaca que 24 por ciento de los consumidores afirma que está controlando su consumo de carne y 21 por ciento los alimentos de origen vegetal.
“Le pusimos muchísima más atención a la alimentación, porque esta se volvió una manera de prevenir enfermedades, se volvió un arma muy poderosa para mantener alejados los virus y mantener la inmunidad alta”, sostuvo.
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Cifras de la Organización de las Naciones Unidas estiman que 24 por ciento de la población global tiene un grado de obesidad.
En julio del año pasado, de acuerdo con Mital, casi 60 por ciento de los mexicanos estaban enfocados en tener una dieta que mantenga alejadas las enfermedades crónicas y el entendimiento de sus necesidades físicas.
“Es un momento en el que la gente está muy confundida sobre qué necesita y aparecen oportunidades que pueden ser más claras. Ahora no se trata de un producto específico para un grupo, sino de prevención”, dijo Méndez.
En este sentido, señaló que para los fabricantes existe el reto de hacer reducciones en el contenido de algunas de sus formulaciones, privilegiando insumos como la fibra y añadiendo texturas.
“Un desafío muy grande es en relación a los alimentos procesados, principalmente en lo relacionado a las comidas instantáneas. Lo que hacen es buscar alimentos que puedan ser incorporados a una comida más casera y balanceada. Eso es un abordaje muy interesante”, agregó.
Sostuvo que actualmente 30 por ciento de la población está preocupada por subir de peso. En 2019, 56 por ciento de los consumidores del país ya señalaban que preferían productos que les ayudara a mantener un peso saludable y que esta preocupación permanecerá a largo plazo.
“Por otro lado, el consumo de alimentos indulgente (como dulces y productos altos en azúcar) este tipo de productos aumentó, pero la gente no quiere seguir con ese ritmo, casi la mitad de los mexicanos comía, pero hacía un año sólo 10 por ciento dice que comerá alimentos indulgentes con frecuencia”, finalizó.
AMP