Los precios del petróleo ganan terreno, mientras los inversores evaluaban el impacto del rechazo israelí a una oferta de alto el fuego de Hamás y la inesperada caída de las existencias de combustible y destilados en Estados Unidos.
Los futuros del crudo Brent subieron 57 centavos, o 0.72 por ciento, a 79.78 dólares el barril. Los futuros del petróleo estadunidense West Texas Intermediate subieron 47 centavos, o 0.64 por ciento, a 74.33 dólares.
El barril de referencia Brent vuelve a acercarse a los 80 dólares, tras registrar ganancias en cada una de las tres sesiones anteriores.
"La reciente fortaleza es el resultado de la respuesta israelí a la contraoferta de Hamás al plan de paz original, que asegura que las hostilidades en el mar Rojo continuarán sin tregua", dijo el analista de PVM, Tamas Varga.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, rechazó la última oferta de Hamás de alto el fuego y devolución de los rehenes retenidos en la Franja de Gaza, pero el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, afirmó que aún había margen para la negociación.
Una delegación palestina de Hamás encabezada por el alto cargo Khalil Al-Hayya tenía previsto viajar a El Cairo hoy para mantener conversaciones sobre el alto el fuego con Egipto y Qatar.
Las tensiones en Oriente Medio han mantenido en vilo al mercado desde octubre, con avances limitados en las conversaciones para poner fin al conflicto de Gaza.
Cifras de inventarios en EU
Una reducción mayor de lo previsto de los inventarios estadunidenses de gasolina y destilados medios también impulsaba al mercado del petróleo.
Las existencias de destilados cayeron en 3.2 millones de barriles, a 127.6 millones, según datos de la Administración de Información de Energía, frente a las expectativas de un descenso de 1 millón de barriles. Las existencias de gasolina cayeron en 3.15 millones de barriles, frente a las previsiones de los analistas de un aumento de 140 mil barriles.
La reducción de las existencias de combustible, combinada con el aumento de las de petróleo, fue una señal del mantenimiento de las refinerías estadunidenses, según Varga.
PML