Las cifras de empleo correspondientes a julio de 2020 publicadas por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) reflejan que se están dando pequeños pasos en la recuperación, tras el impacto por las medidas de contingencia sanitaria para combatir la pandemia del covid-19, pero el proceso será largo, estima Grupo Financiero Monex.
En un documento, indicó que el panorama en julio siguió mejorando, aunque a un ritmo modesto y parece formar parte del efecto rebote que se presentó en el mercado laboral tras el fin del confinamiento en el país.
Monex señaló que los avances del mercado laboral en julio son una buena noticia, pero aún hay una brecha importante para concretar la recuperación, y la desaceleración que se dio en el mes sugiere que el proceso será prolongado.
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Además, abundó, en línea con lo observado a partir de los reportes del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), la diferenciación del desempeño de las estadísticas laborales por género, sector y región conllevarían una mayor concentración del ingreso que a su vez inhibiría el crecimiento del consumo doméstico.
Sin embargo, parece que el techo de la tasa de desempleo será menor a 6.0 por ciento que alcanzó durante la crisis financiera de 2009, lo que balancea las expectativas.
La institución financiera explicó que la Población Económicamente Activa (PEA) mantiene un déficit de 7.5 millones de personas respecto a su nivel previo a la crisis y aunque la situación ha mejorado en comparación con los 12.6 millones que inicialmente dejaron el mercado laboral durante abril, la mayoría de los empleos perdidos aún está pendiente de recuperarse.
Añadió que el desempleo pasó de 5.5 a 5.4 por ciento de la PEA, pero la recuperación no fue equitativa, pues se concentró en el desempleo para hombres que pasó de 5.9 a 4.8 por ciento, mientras que la tasa para mujeres incluso se incrementó desde 4.8 por ciento en junio hasta 6.3 en julio.
Asimismo, el peso del desempleo permanente (mayor a tres meses) sigue creciendo, pues fue la condición en la que se encontró 18.4 por ciento de la población desocupada frente al 12.1 por ciento de junio y 8.5 de inicios de la pandemia, lo que podría obstaculizar el descenso de la tasa de desempleo en los próximos meses.
A esto se suma que la brecha laboral fue 36.4 por ciento de la PEA potencial, casi el doble que antes de la crisis y 45 por ciento mayor a la de la crisis financiera de 2009.
srgs