El impacto de la pandemia de covid-19 en América Latina se observa en una menor producción de acero, en mayo cayó 29 por ciento en comparación con el mismo mes del año pasado, pero subió 8 por ciento en comparación con abril de este año, impulsado por Brasil, informó la Asociación Latinoamericana del Acero (Alacero).
En los primeros cinco meses del año la producción suma una caída de 17 por ciento, comparado con el mismo periodo del año pasado; principalmente porque la región enfrenta la mayor crisis de su historia moderna y se encuentra en un momento de transición con señales de reactivación económica, pero a la vez con dificultades para controlar la pandemia.
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A nivel mundial la industria siderúrgica redujo su producción de acero crudo en 5.2 por ciento hasta mayo de 2020, con relación al mismo periodo de 2019, mientras que en China subió el 1,8 por ciento. Y comparado con abril se registró un incremento del 9,1 por ciento impulsado por China, que tuvo un aumento del 8.5 por ciento.
Alacero estima que debido a la contracción económica, la demanda mundial de acero podría disminuir un 6.4 por ciento en 2020 y recuperarse un 3.8 por ciento durante 2021. Esta reducción se debe principalmente a la caída generalizada en todos los países, con excepción de China, que crecerá el 1 por ciento en 2020.
En el primer trimestre las importaciones como porcentaje del consumo de acero alcanzaron el 35 por ciento, mientras que en abril se incrementaron hasta el 41 por ciento. La producción local en el primer trimestre, representó el 81 por ciento del consumo, pero en abril fue solo del 74 por ciento.
Ante este escenario, Francisco Leal, Director General de Alacero, comentó que la sustitución de producción por importaciones en las condiciones actuales de crisis debe ser un llamado de atención a los gobiernos para enfrentar esta problemática.
srgs