En el estado de Puebla como en diferentes partes del país, se presentará un cierre de 2022 y un inicio 2023 heterogéneo porque hay regiones que están viviendo la revolución económica más importante de los últimos 25 años; sin embargo, lo peor de la inflación ya pasó.
Enrique Covarrubias Jaramillo, egresado en Matemáticas y Economía por la Universidad de las Américas Puebla (Udlap), destacó que Puebla depende de que se normalice la situación de semiconductores para que su situación económica mejore ante la relación que tiene con el sector automotriz.
Destacó que a la economía local están llegando nuevas inversiones, lo cual, es positivo porque se traduce en nuevos proyectos y en un nuevo impulso para el cierre de este 2022 y el inicio de 2023.
"En cuanto a la economía estatal, la noticia buena es que con todo y que el sector automotriz está en una situación complicada sí está llegando inversión y está llegando por carretadas", añadió Covarrubias Jaramillo.
Actualmente, la inflación es la principal preocupación entre los empresarios, tanto en el estado de Puebla como en todo el país, ya que impacta de manera directa en los costos de producción y en los productos finales.
La gobernanza y las condiciones económicas de Estados Unidos, se colocan como las segundas preocupaciones del sector empresarial ante los efectos que se puedan presentar y que repercutan en los procesos productivos.
En el cierre de este 2022, el mundo se está desacelerando, buscando crear una recesión económica con la esperanza de que eso mitigue los altos precios que se están presentando.
"Ahora, se busca contrarrestar los tan elevados precios que estamos viviendo y se busca que no se ingrese a una crisis demasiado profunda. Además, los bancos centrales tienen que cuidar que la economía no entre en una crisis. Sí, que controle la inflación, pero no tanto que se les vaya a salir de control esta crisis”, apuntó.
Dio a conocer que a nivel internacional y en las economías locales ya se aprecia que se está transitando en medio de una recesión económica y la situación se puede complicar.
"Ya se está viendo la recesión económica, se esperan caídas muy fuertes en los ingresos de las empresas más grandes del mundo y, en particular, de las americanas, aunque el desempleo está en el momento más bajo de su historia", añadió.
Durante reunión organizada por la Dirección de Vinculación con Egresados de la Udlap, el especialista resaltó que en este año, cinco monedas en el mundo que apreciaron en este 2022, las de Uruguay, Angola, Rusia, Brasil y México, es decir, el peso.
“Cuatro de esas monedas son de economías que se benefician mucho de precios elevados a materias primas, las de Uruguay, Angola, Rusia y Brasil; y la quinta es una moneda muy inusual de un país que pierde cuando los precios de las materias primas suben porque es el segundo importador más importante de gasolina a nivel global, y ese país se llama México", comentó.
El peso mexicano subió dos por ciento en este año y del 1 de agosto a octubre, ha sido la única moneda en el mundo que ha ganado terreno frente al dólar, situación que no se puede perder de vista.
CHM