El valor de la producción de tejocote, fruto de temporada de fin de año que se ocupa en la preparación del tradicional ponche decembrino, alcanza los 22.7 millones de pesos al año, monto por encima de la Ciudad de México, Zacatecas y Jalisco; lo que ubica a Puebla en el primer lugar a nivel nacional.
En el estado se producen más de cinco mil 337 toneladas de tejocote al año, es decir, se concentra el 94.5 por ciento del valor total de la producción del país.
En gran parte del territorio poblano se cosecha el fruto que comienza a ocuparse desde la temporada de Día de Muertos y que se extiende hasta las fiestas decembrinas y el Año Nuevo.
De acuerdo con el reporte sobre la Producción Agroalimentaria de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), la producción nacional de tejocote asciende a cinco mil 522 toneladas del fruto que, en diferentes partes del país, también se le conoce como manzanita y manzana de Indias; mientras que su valor de producción supera los 24 millones de pesos.
Después de Puebla, Chiapas aparece como el segundo estado con mayor producción de tejocote, con 58 toneladas; le sigue la Ciudad de México con 43 toneladas; Zacatecas, 33 toneladas; Jalisco, 27 toneladas; y el Estado de México, 23 toneladas.
El tejocote es un fruto silvestre que se encuentra adaptado a una gran diversidad de suelos y climas, aunque el hábitat natural está en el altiplano mexicano y en especial de la región de los volcanes Izta-Popo, en la llamada Sierra Nevada, dentro del estado de Puebla.
Entre los municipios con mayor producción de tejocote se encuentran: Soltepec, Chiautzingo, Huejotzingo, Calpan y Tlahuapan. La lista de municipios con vocación productora del fruto se completa con San Salvador El Verde, Domingo Arenas, San Felipe Teotlalcingo, Tochimilco, San Nicolás de los Ranchos, San Pedro Cholula, Juan C. Bonilla, San Jerónimo Tecuanipan, Guadalupe Victoria, Nealtican, San Andrés Cholula, Tepeyahualco de Hidalgo, Tlaltenango, San Martín Texmelucan y Coronango.
El tejocote no solo se consume como fruto de temporada o se utiliza en la preparación del ponche, bebida que se realiza con diferentes frutos, también es clave en gelatinas, mermeladas, dulces y cristalizados, helados y licores.
A través de la deshidratación, se aprovecha la pulpa del tejocote y tiene aplicaciones farmacéuticas, para elaborar cremas y geles reafirmantes y en la preparación de vendajes que facilitan la cicatrización de heridas; además aporta fibra que se encarga de eliminar los residuos y toxinas.
La palabra tejocote deriva del náhuatl texocotl que significa fruta agria silvestre o dura; mientras que el fruto pertenece a la familia de las rosáceas y concretamente al género Crataegus, el cual agrupa alrededor de 140 especies.
AFM