Ricardo Fuentes Nieva, director ejecutivo de Oxfam México, es amante de los tacos al pastor y asegura que “no hay mejor comida que la mexicana”.
Este egresado con los más altos reconocimientos del CIDE y maestro en Economía por la Universitat Pompeu Fabra, de Barcelona, considera que los jóvenes deben cuestionar su entorno y seguir aprendiendo del mundo que los rodea.
En sus tiempos libres le gusta practicar deportes, particularmente correr; además reconoce que su mejor aportación al cuidado del medio ambiente es no tener vehículo ni hijos.
Primero en Reino Unido, donde fue colaborador en el Banco Mundial y en el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), y ahora en México, Fuentes Nieva se ha dedicado a la investigación en materia de desigualdad social y a realizar labores humanitarias; en el periodismo, explica, encontró una vía para denunciar la injusticia que prevalece en el mundo.
Y a pesar de tener una agenda de trabajo muy apretada, se da tiempo para salir con sus amigos y ver series de televisión, como Game of Thrones, una de sus favoritas.
¿Cómo se define Ricardo Fuentes Nieva?
Soy un nerd preocupado por los cambios sociales.
Si no fueras director de Oxfam México, ¿a qué te dedicarías?
Me hubiera gustado ser cronista deportivo.
¿Cuál es su deporte favorito?
Me gusta el beisbol, pero el futbol es mi favorito.
“Nació en tercera base y piensa que conectó un triple”, ¿a qué te refieres con esa metáfora que utilizas constantemente cuando hablas de desigualdad?
Se utiliza para describir los privilegios de origen. La imagen refleja todas las oportunidades de aquellos que nacen con el color de piel que les da los beneficios, que provienen de familias que han podido acumular ventajas y transmitirlas.
Pero existe el otro lado, millones de personas en este país y en este momento a quienes no se les da siquiera oportunidad de presentarse en la caja de bateo. Y después se les juzga por su supuesta falta de contribución al juego.
¿Cuál es tu siguiente reto profesional?
Todavía no lo sé, la vida da muchas vueltas.
¿Cuál es tu libro favorito?
Tengo varios: Rayuela, de Julio Cortázar; Pobreza y hambruna: un ensayo sobre el derecho y la privación, de Amartya Sen, y Orígenes del Orden Político, de Francis Fukuyama.
Si pudieras elegir un país para trabajar, ¿cuál sería?
Definitivamente México, desde hace tiempo le di mi voto de confianza a este país.
Has congeniado con personajes internacionales y eso ha ampliado varios rubros en su vida, entre ellos el lenguaje, ¿qué idiomas se hablan en casa?
Siempre español.
¿Cuál sería tu mensaje a los jóvenes que aspiran a dedicarse a la investigación?
Que trabajen mucho, que encuentren una habilidad específica, y aunque pasen los años, que sigan interesándose por aprender y ampliar su conocimiento.
¿Qué acciones ejerces en tu vida cotidiana para cuidar el medio ambiente?
Pues no tengo carro y mucho menos hijos.
¿Cuál es el lugar que más ha impactado tu trayectoria de investigador?
Estados Unidos, es una nación de muchas contradicciones, da muchas oportunidades, pero a la vez es muy injusto.
¿Qué haces en tus tiempos libres?
Correr, estar con amigos, ver películas y series como Breaking Bad, Game of Thrones y mi filme favorito es Los Andersson Road.
¿Comida mexicana o extranjera?
Siempre la mexicana.
¿Cuál es tu platillo favorito?
Es muy difícil escoger uno, pero si tuviera que hacerlo, serían los tacos al pastor.
¿Qué música te gusta?
De todas, pero actualmente estoy en mi etapa indie.
¿Cuál crees que es el reto actual del periodismo en México?
La independencia. El periodismo debe reconocerse como el cuarto poder, debe ser crítico, estar basado en la veracidad hacia sus lectores y no estar atado a las cúpulas del poder.
¿Cómo evitas la injusticia en tu casa?
Cuestionando siempre mis acciones, tratando de aprender y escuchando a los demás.