La inflación que superó niveles de 8 por ciento y presionó el costo de diferentes insumos, entre ellos, alimentos y materiales para la construcción; la escasez de insumos que impactó en cadenas productivas como la automotriz con paros técnicos; la pobreza laboral de casi la mitad de los trabajadores; la recuperación del empleo a niveles prepandémicos y récord en la llegada de remesas, fueron algunos de los indicadores que marcaron la economía del estado de Puebla durante 2022.
En medio de la reanudación de actividades económicas frente a la emergencia sanitaria de covid-19, la entidad poblana presentó un alza en diferentes insumos y productos del mercado agrícola que repercutieron en el costo de alimentos de consumo popular como el pan y la tortilla, con incrementos hasta de 20 por ciento.
Derivado de ajustes en los precios de harinas huevo y azúcar pan de repostería registró a lo largo del año un incremento de dos pesos; en tanto, la tortilla por alza en la tonelada de maíz llegó a niveles no vistos al venderse entre 18 a 20 pesos por kilo.
El año 2022 queda marcado por un Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) que se aceleró y registró una variación que, en algunas quincenas, fue superior a ocho por ciento, es decir, se colocó en niveles que no se habían registrado desde hace más de 20 años.
Datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) muestran que Puebla capital arrancó este año con una tasa de inflación general de 6.62 por ciento, el valor más alto para un inicio de mes desde hace más de seis años, pero luego los niveles siguieron creciendo.
La ciudad de Puebla reportó en febrero de 2022 un índice de precios de 6.71 por ciento a tasa anual, mientras que, en marzo de 2022, la inflación llegó a 7.01 por ciento a tasa anual. En abril, la ciudad de Puebla acumuló un índice de inflación de 7.25 por ciento; en tanto, para mayo de 2022, este indicador se colocaba en 7.28 por ciento; mientras que, en junio, es decir, a mitad de año este año, la angelópolis alcanzó una tasa de inflación de 7.53 por ciento.
El segundo semestre del año se caracterizó por niveles más altos de inflación, luego que julio llegaba a 7.11 por ciento, pero en agosto subió a 8.28 por ciento, septiembre a 8.55 por ciento y, en octubre la capital poblana alcanzó una tasa general de 8.81 por ciento.
La ciudad de Puebla acumuló en noviembre pasado una tasa anual de inflación de 7.31 por ciento, mientras que en la primera quincena de diciembre retomó la tendencia al alza y cerró en 8.07 por ciento.
Paros técnicos en industria automotriz
La falta de componentes desencadenó que, a lo largo, del año, se presentaran paros técnicos en la industria automotriz que genera más del 40 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) de Puebla.
La falta de semiconductores afectó los niveles de producción, con lo que armadoras en Puebla como Audi y Volkswagen se vieron obligadas a programar paros técnicos a lo largo del año.
En su momento, el secretario general del Sindicato Independiente de Trabajadores de Volkswagen de México (Sitiavw), José Juan Hernández, explicó que la falta de semiconductores está impactando en los niveles de producción en la planta armadora Puebla, donde el Jetta, de los tres autos que se ensamblan en la factoría de Cuautlancingo, Tiguan y Taos, es el modelo más afectado.
La producción del modelo Jetta de Volkswagen registró una disminución de 21.73 por ciento durante los primeros diez meses de 2022, con relación a igual lapso del año pasado. En contraste, la fabricación de Taos repuntó 60.5 por ciento y Tiguan con 6.6 por ciento en comparación con el mismo periodo del año previo.
La planta armadora de vehículos cerró sus actividades en la segunda quincena de diciembre con paros técnicos que ligó con un periodo vacacional, de tal forma que la reanudación de labores será a partir del 10 de enero de 2023, de forma diferencia según el segmento y la disponibilidad de materiales.
En el caso de Audi México, con sede en San José Chiapa, Jacobo Issa, vicepresidente de Recursos Humanos y Organización de la empresa, comentó que el armado del modelo Q5 fluyó a lo largo del año ante estrategias para poder mantener la producción; sin embargo, reconoció que existe incertidumbre para 2023 en torno al abasto de semiconductores.
Puebla recupera niveles de empleo
Al estado de Puebla le tomó 22 meses remontar los números rojos en el mercado laboral, toda vez que en octubre logró recuperar los más de 39 mil empleos que perdió por la pandemia de covid-19.
En el décimo mes de este 2022 registró 631 mil 105 puestos de trabajo afiliados al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), cifra con la que rebasó los niveles de empleo formal que tenía previo a la pandemia.
Una vez que fue declarada la situación de emergencia sanitaria -en marzo de 2020- fueron suspendidas las actividades productivas con lo que se cancelaron miles de plazas, de las que ocho de cada diez bajas fueron de puestos permanentes.
En la medida en que se reanudaron labores en medio de la pandemia, la mayor recuperación de empleo formal se dio en la industria de transformación y comercio, por el contrario, las actividades relacionadas con servicios para empresas y el hogar siguen sin igualar la cifra de puestos de trabajo.
En pobreza laboral, uno de cada dos habitantes
En el contexto de la reanudación de actividades, Puebla registró al cierre del tercer trimestre de este 2022 un 49.4 por ciento de la población en pobreza laboral, es decir, pese a destinar todos los ingresos familiares, casi la mitad de los habitantes no alcanzan a adquirir la canasta básica alimentaria.
De acuerdo con el Índice de la Tendencia Laboral de la Pobreza (ITLP) del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), la población que no puede adquirir la canasta básica alimentaria aumentó 15 por ciento durante el periodo de la pandemia de covid-19, es decir, de marzo de 2020 al noveno mes de este año.
La pobreza laboral se presenta en una familia cuando, a pesar de destinar todos los recursos que perciben sus integrantes, no alcanzan para comprar la canasta básica alimentaria. En noviembre de 2022, Puebla se colocó en el conjunto de catorce estados con el salario más bajo del país, con un ingreso de 424.30 pesos diarios.
Este monto se traduce en un promedio de 12 mil 729 pesos mensuales, en contraste a los 14 mil 508 pesos que ganan trabajadores en el resto del país.
De acuerdo con el reporte “Salario diario asociado a Trabajadores asegurados” que publica la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), el ingreso diario de los poblanos se encuentra 5 mil 639.7 pesos por debajo respecto al ingreso reportado en la Ciudad de México, donde se registra el ingreso más alto a nivel nacional.
Récord en remesas, pero menos inversión
Otro de los indicadores económicos que marcaron 2022 fue la llegada de remesas, toda vez que de enero a septiembre Puebla captó 2 mil 3.7 millones de dólares por este concepto, un monto nunca registrado para un periodo similar en el estado, según datos del Banco de México (Banxico).
El envío de los connacionales radicados en el exterior representó un aumento de 31 por ciento, con relación al monto acumulado en los primeros nueve meses del año pasado, que fue de mil 529.1 millones de dólares.
En medio de la crisis sanitaria que representó el covid-19, el flujo de remesas se mantuvo al alza, pues en el trimestre enero -marzo de este 2022 ingresaron 576.4 millones de dólares; en el periodo abril-junio sumaron 697.3 millones de dólares; mientras que en el lapso de julio a septiembre de este mismo año se observó un mejor desempeño al contabilizarse 729.9 millones de dólares.
Puebla capital concentró el mayor monto, seguido de Tehuacán, Atlixco, San Martín Texmelucan, Tecamachalco, Acatlán Tulcingo, Teziutlán y San Pedro Cholula, municipios que se caracterizan por la expulsión de migrantes.
Las remesas se mantienen como una de las principales fuentes de ingreso económico en la entidad poblana, toda vez que sobrepasan el recurso que llega por concepto de Inversión Extranjera Directa (IED).
Conforme a datos sobre la evolución de IED y los ingresos de remesas publicado por DataMéxico de la Secretaría de Economía federal, los envíos de los connacionales tomaron mayor fuerza en el contexto de la crisis por la emergencia sanitaria de covid-19.
Durante 2022, se acumula un monto total de remesas por dos mil millones de dólares, mientras que la inversión extranjera acumulada en el año alcanza los 614 millones de dólares.
CHM