Nuevas refinerías de AMLO, riesgo crediticio para Pemex: Moody's

Los indicadores crediticios se debilitarían por el financiamiento de una inversión de este tipo, además se distraerían recursos que la empresa necesita para la producción de petróleo y gas, aseguró la agencia calificadora.

AMLO rehabilitará seis refinerías ya existentes, como la de Veracruz, y construir dos más (Notimex).
Ciudad de México /

El plan energético del virtual presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, que incluye la posible construcción de dos nuevas refinerías, así como controlar los precios de los combustibles y, potencialmente, retrasar las subastas de petróleo y gas, representan riesgos crediticios para Pemex, aseguró la agencia calificadora Moody's.

"De llevarse a cabo los planes de estas refinerías, mismos que todavía no están confirmados, los indicadores crediticios de Pemex se debilitarían por el financiamiento de una inversión de este tipo con deuda, al mismo tiempo que se distraerían recursos que la compañía necesita dedicar de manera primordial a la producción de petróleo y gas", comentó la agencia calificadora en un reporte. 

Indicó que los planes de López Obrador crean incertidumbre en torno a si la petrolera puede continuar aprovechando los precios favorables del petróleo y el sólido apetito de inversión de las compañías extranjeras. 

"Las operaciones y calidad crediticia de Pemex han mejorado lentamente desde 2016, después de hacer ajustes importantes a sus gastos operativos e inversiones de capital", señaló. 

Sobre el posible control de los precios de los combustibles, la agencia indicó que la nueva administración pudiera ajustar los impuestos para mantener la estabilidad de estos, pero hacerlo en línea con la inflación provocará incertidumbre sobre la generación de efectivo para Pemex. 

Además, los precios del crudo han incrementado y el debilitamiento del peso ha encarecido la producción de la gasolinas. Pemex paga el crudo en dólares estadunidenses, sin importar si lo produce o lo importa. Actualmente, los impuestos representan alrededor de 30 por ciento de los precios del combustible puesto en las bombas despachadoras. 

Otro riesgo, indicó la calificadora, tiene que ver con las asociaciones extranjeras (Farm-outs) y con si Pemex tendrá capacidad para continuar haciéndolas.

A marzo de 2018, la empresa productiva del Estado tiene deuda por más de 106 mil millones de dólares y pasivos de pensiones por 64 mil millones. Es el deudor más grande de todas las petroleras calificadas en el mundo. 


CPR

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