La reforma a la Ley Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión para recrear el registro de usuarios de telefonía móvil aprobada por el Senado, es un riesgo que afectan los valores democráticos, representa una amenaza a los datos personales de la ciudadanía y viola diversos preceptos constitucionales, afirmó el sector privado.
El presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana de la Ciudad de México (Coparmex-CdMx), Armando Zúñiga, afirmó que es preocupante que el registro repite los errores cometidos en regulaciones previas, las cuales lejos de combatir la inseguridad y la extorsión, generaron más riesgos y derivaron en delitos nuevos.
"Lamentamos que la mayoría de las y los senadores desatendieran las razones técnicas, jurídicas y económicas expuestas por los especialistas y sus compañeros legisladores, quienes han señalado reiteradamente que el registro de usuarios de telefonía en los términos en los que fue planteado viola los derechos humanos de los usuarios", afirmó.
En un comunicado, indicó que esta iniciativa viola el principio de presunción de inocencia al asumir que la persona responsable de una línea registrada, automáticamente será responsable por cualquier delito asociado a un número que podría ser utilizado por cualquier persona.
Agregó que limita el derecho a la libertad de expresión de los ciudadanos; incrementa la brecha digital; atenta contra el mandato constitucional de que nadie puede ser molestado en su persona, familia, domicilio, papeles o posesiones sin mandato escrito de una autoridad competente, y viola la irretroactividad de la ley.
"La adopción de este tipo de medidas, no son dignas de un gobierno democrático y plural, y solo pueden ser interpretadas como una nueva señal del riesgo que enfrentan los valores democráticos en nuestro país", aseguró.
En ese sentido el dirigente empresarial, hizo un llamado al Poder Ejecutivo, para que revise con cuidado el proyecto y sus implicaciones antes de publicarlo en el Diario Oficial de la Federación, ya que traerá consecuencias delicadas para los millones de usuarios de telefonía móvil del país.
MRA