El gobierno francés validará un préstamo de 5 mil millones de euros, unos 5 mil 600 millones de dólares, respaldado por el Estado para ayudar al fabricante de automóviles Renault a atravesar la crisis provocada por el coronavirus SARS-COV-2, que causa la enfermedad covid-19.
El gobierno estima haber obtenido las garantías que exigía sobre el futuro de los empleados de la planta de Maubeuge, en el norte de Francia, que se oponen a una fusión con la planta de Douia, a 70 kilómetros de ahí.
El ministro de Finanzas, Bruno Le Maire, "firmará hoy la garantía del préstamo de 5.000 millones de euros para Renault", dijo a la AFP el ministerio de Economía tras una reunión con ejecutivos, representantes de los trabajadores y funcionarios locales.
El gobierno anunció el préstamo el mes pasado, pero dijo que estaba condicionado al compromiso de Renault de mantener los puestos de trabajo y las operaciones básicas en Francia.
La automotriz, con graves dificultades financieras y debilitado por la crisis del coronavirus, anunció el despido de 15 mil puestos de trabajo en el mundo, de los cuales 4 mil 600 en Francia.
La medida forma parte de un plan de recortes de 2 mil millones de euros (unos 2 mil 200 millones de dólares) en tres años.
Bruno Le Maire "pidió que se iniciaran inmediatamente conversaciones con los sindicatos sobre la puesta en marcha de un proyecto industrial para el futuro (...) que garantice a largo plazo, más allá de 2023, el empleo y las operaciones industriales en Maubeuge", indicó el ministerio de Economía.
"No se tomará ninguna decisión sobre el traslado de actividades a menos que haya sido aprobada por todas las partes", agregó.
Entre las 14 plantas que tiene en Francia, Renault planea cerrar una sola, en Choisy-le-Roi, un suburbio al sur de París. Los empleados de esta planta estaban en huelga reconductible para protestar en contra del cierre.
"Más de 200 empleados" entre los 262 que cuenta la planta están "movilizados para salvar sus empleos", dijo a la AFP, Brahim Hachouche, del sindicato fuerza Obrera.
Según otro sindicalista, Fabien Gâche, esta huelga es el "preludio de acciones masivas de todos los establecimientos".
El martes por la mañana se celebró una reunión de la intersindical a nivel central "en este sentido", aseguró.
MRA