El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) impuso cifras que le dieron un golpe al empleo durante los últimos tres meses de 2020 en Tlaxcala. Entre octubre y diciembre del año pasado creció el número de personas que trabajó menos de 35 horas a la semana y que tuvieron ingresos mensuales inferiores al salario mínimo.
De acuerdo a la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) se informó que en el periodo mencionado de 2019 el número de personas desempleados ascendió a 34 mil, en tanto en 2020 la cifra fue de 46 mil personas en dicha situación.
Ello significa que la Población Económicamente Activa (PEA) de 2019 era de 623 mil, mientras que en 2020 fue de 612, lo que representa una disminución de 11 personas.
Ese panorama tiene repercusión en la tasa de desocupación, ya que esta registró un aumento de 2.1 puntos porcentuales al pasar de 3.5 por ciento a 5.6 a nivel estatal. No obstante, el personal ocupado subordinado y remunerado significaron el 64.5 por ciento del total de la población ocupada y aquel por cuenta propia representó 25.0.
Tlaxcala se ubica por encima de la tasa nacional que fue de 23.5 por ciento, solo debajo de Chiapas que cerró 2020 con una tasa de condiciones críticas de ocupación de 44.4 por ciento, mientras que Nuevo León, Sinaloa, Jalisco y Querétaro tuvieron el menor porcentaje de trabajadores en condiciones críticas.
Con base a lo anterior, es preciso señalar que durante el cuarto trimestre de 2020 la Tasa de Informalidad Laboral (TIL1) fue de 72.0 por ciento de la población ocupada, lo que representa un aumento de 0.7 puntos porcentuales a la del cuarto trimestre de 2019.
Desde que inició el año, las autoridades del Poder Ejecutivo no han dado a conocer algún plan o inversión para recuperar los empleos que se han perdido por los estragos de la pandemia provocada por la inminente llegada del covid-19.
La emergencia sanitaria ha limitado la movilidad económica y por ende se carece de actividad comercial cotidiana, esto ha orillado al despido de personal como alternativa de solución a la crisis económica.
AFM