Ante el repunte de contagios de covid-19, al cierre de año podrían cerrar entre 250 mil y 300 mil pequeños comercios del país, señaló Cuauhtémoc Rivera, presidente de la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (Anpec).
“Hay mucha preocupación y desesperanza en que hay una segunda ola de la pandemia. Esto lo tiene el comerciante y la sociedad en su conjunto, es algo muy difícil de aguantar; el tema fundamental es que hay un hartazgo generalizado porque han habido muchos mensajes encontrados, se han dado falsas expectativas, es una zozobra que ha desgastado mucho al país y volver a ella y tener que echarnos hacia atrás. Lamentablemente, lo que se está reflejando hasta ahora, están dadas las condiciones para que la segunda ola prospere con mucha fuerza y nos estamos acercando a un tobogán de dolor”, sostuvo.
A inicios de año existían un millón 200 mil pequeños comercios en México; al primer trimestre de la pandemia la Anpec estimó que habían cerrado 150 mil unidades, producto de las afectaciones económicas.
“Estamos preocupados por hacerle ver a la autoridad que ya no se comentan los problemas de mensajes encontrados, que definan lo esencial y no esencial con mayor transparencia, que busquen nuevos voceros, porque nos hemos dado cuenta que cada vez es menos la población que atiende los llamados del gobierno, se desgastó el barco gubernamental”, sostuvo.
Indicó que el sector está preocupado por entrar de nueva cuenta a restricciones comerciales en 14 estados, entre los que se encuentra la Ciudad de México y lo que va a representar para el sector comercial.
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“Como estamos viendo el comportamiento de consumidor, va a pasar de largo la temporada navideña, incluyendo el Buen Fin”, afirmó.
De acuerdo con la décimo tercera encuesta del organismo, Por una reactivación económica alrededor de 7 por ciento de los encuestados afirmó estar a punto de cierre y 73.35 por ciento indicó que ha tenido bajas en ventas entre 30 y 50 por ciento.
Entre los productos que mostraron alza en precios se encuentran el arroz, huevo, refresco, jitomate, aguacate, cebolla y limón.
Los de mayor consumo son los empaquetados y los que se han dejado de consumir son artículos de aseo personal, embutidos, lácteos, dulces, quesos y comida enlatada.
De los mil 142 encuestados, 89.90 por ciento observó que a los clientes no les alcanza para la canasta básica y que muestran dificultades para surtir productos básicos para el consumo familiar. De los pequeños comerciantes, 88.17 por ciento afirmó que el consumo que realizan en sus unidades es diario.
“Está desapareciendo el formato del surtido de la despensa, se compra lo que se compra a diario; el canal moderno está pasando cada vez más a formatos de proximidad, como una vía para poder acercar más sus negocios”, indicó Rivera.
El 78.41 de las tienditas indicó que sus clientes han pedido fiado por lo menos una vez en la pandemia.
La encuesta señala que 20.51 por ciento de los comercios incrementó la entrega a domicilio a través de whatsapp; y 26 por ciento tiene un empleado con una aplicación de contacto para hacer dichas entregas.
De los encuestados 83 por ciento dijo que aún no tiene medios de pago electrónicos, por lo que el pago en efectivo sigue siendo el predilecto en el canal; Cuauhtémoc Rivera sostuvo que “no hay condiciones” para el uso de plataformas como el sistema de cobro digital (CoDi).
srgs