Luego que el presidente municipal Eduardo Rivera Pérez aseveró que no existen las condiciones legales y de guerra para implementar un “toque de queda”, los habitantes de la junta auxiliar de La Resurrección sostuvieron que no necesitan el aval de la autoridad municipal y por temas de seguridad lo implementarán en caso de que no tengan solución al tema.
En conferencia de prensa, destacaron que la inseguridad está desatada y que este es una causal para decretar el toque de queda, pues señalaron que no van esperar que la delincuencia siga aumentando.
En este contexto, Máximo Cuatlaxahue Santabarbara, habitante del lugar, señaló que en la demarcación hay un Consejo Indígena el que decide si se implementa un toque de queda, y que se rigen por sus usos y costumbres.
E incluso aseguró que el consejo está por encima del presidente auxiliar, por lo que destacó que ellos pueden decidir de las estrategias de seguridad y no necesitan el aval de las autoridades municipales.
Ante esto, sostuvo que este tipo de acciones para prevenir la inseguridad existe, esto al comparar un esquema de fraccionamiento, pues dijo que se cierran los accesos principales y hay ciertas reglas para ingresar.
“Si hay las condiciones para que se implemente un toque de queda porque en la comunidad está desatada la inseguridad, es más el día que declaró el presidente municipal minimizando el tema, al día siguiente balearon a un vecino de la junta auxiliar de San Aparicio”, enfatizó.
Agregó que el tema de inseguridad está desatada, sin control, debido a que en plena luz del día se registran asaltos, pues los elementos de seguridad no tienen la capacidad para dar respuesta a los ciudadanos.
Asimismo, precisó que dentro de otro de los temas que están pendientes y que se plantearon con las autoridades municipales al sostener una reunión en la Secretaría de Gobernación municipal, es el apoyo para resolver la deuda de 12 millones de pesos por el pago de luz para que cuenten con agua potable, así como combatir la tala de árboles.
CHM