Las vacaciones de Semana Santa en Playa Miramar y Tampico como el resto de la zona sur de Tamaulipas, ha permitido a dueños de hoteles como a propietarios de casas, departamentos y residencias ayudar al arribo de turistas. Esto se refleja en la plataforma de alojamiento Airbnb, al registrarse una menor disponibilidad en comparación con otras fechas.
En colonias como Petrolera y Lomas de Rosales, además de sector Miramar y en Velamar de Ciudad Madero, son contados los domicilios integrados dentro de esta plataforma digital sin ocuparse a unos días de esta etapa de asueto en el año. Algunos precios rondan desde los mil 600 hasta los 6 mil pesos, al incluir servicios adicionales como albercas.
Esto, mencionó el Consejo Empresarial (CEM) es positivo y habla de la necesidad de contar con mayor infraestructura, sobre todo del sector privado, en incrementar el número de hoteles a fin de atender la demanda que crecerá en próximos años con el arribo de visitantes en este periodo, mencionó su presidente Felipe Olvera.
Ubicaciones y precios
Entre los puntos cercanos a Miramar, desde el 27 al 31 de marzo, el hotel El Navegante cuenta con algunos cuartos libres cuyos precios oscilan de los mil 900 hasta los 3 mil 400 pesos, ya sea de 2 a 4 personas. En la Colonia Miramar solamente existe un par de lugares de descanso, con un costo máximo por noche de 6 mil pesos.
Misma situación se registra en la zona de Fundadores, con los costos similares pero dan la oportunidad de tener alberca y estar más cerca de la costa. Para dichas fechas, una de las zonas preferidas por la clase alta, Velamar, está totalmente ocupada. Aún se cuenta con disponibilidad en departamentos de Lomas de Rosales, Petrolera así como Lauro Aguirre, Primavera y Altavista de Tampico.
“Esta solicitud de hospedaje y alojamiento es positiva, incluso, superará la agencia obtenida el año pasado y habla de la sensación de visitar la zona sur, a pesar de la mencionada ausencia de infraestructura. Al final de cuentas, la responsabilidad de todos, tanto autoridad como iniciativa privada es recibir al turista, hacerlos sentir cómodos y con la confianza de regresar”, dijo el titular del Consejo.
Así funciona la reservación
Esta plataforma de alojamiento permite a los dueños de estas propiedades ofrecer al visitante lugares de descanso amueblados, con sala, comedor, cocina, recámaras y baños. Sus precios varían de acuerdo a su ubicación. El usuario, a través de una aplicación, contrata los servicios según las noches que requiere quedarse.
Si bien existe un reclamo de los propios hoteleros al considerarla una competencia desleal, para el CEM esta temporada es una oportunidad de mostrarle a empresarios interesados en el ramo turismo las oportunidades del destino, para abrir negocios de este giro y aprovechar el crecimiento del estado.
“Hasta la propia marca Tampico-Miramar, al igual que palaperos, restauranteros y prestadores de servicio están obligados a promover el destino. Solo así se acrecentará el número de estancias y alojamientos en Playa Miramar como en la restante zona sur del estado”, puntualizó Felipe Olvera.
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