La forma en que Aeroméxico despidió a los tres pilotos involucrados en el avionazo de Durango, violenta la relación laboral, ya que se no ha recibido una notificación oficial y los empleados aún se encuentran en tratamiento médico, afirmó Mauricio Aguilera, vocero de la Asociación Sindical de Pilotos Aviadores (ASPA).
“Me parece una condición extraña, que estando todavía los pilotos en tratamiento médico, uno de ellos aún en el hospital, la empresa anuncie el despido. Eso violenta y pone en una situación no deseada la relación ASPA-Aeroméxico”, comentó.
Señaló que hasta el momento el sindicato no ha sido informado de la separación de estos trabajadores, "solamente nos hemos enterado por lo que se escucha en los medios de comunicación", señaló.
Aguilera explicó que en este tipo de casos, la aerolínea debe acudir a la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje para dar a conocer el despido de los trabajadores y posteriormente una persona de esta autoridad va a las instalaciones del sindicato para informar sobre la decisión.
“Aeroméxico debería apegarse a las disposiciones de derecho de trabajo vigente y primero notificarnos. Tenemos que esperar la notificación de la autoridad laboral, que venga un actuario de la Junta Federal y se inicie el juicio por despido”, indicó
La aerolínea, a través de una carta enviada a sus empleados, notificó que los pilotos Carlos Galván, Daniel Dardon y José Ramón Vázquez, involucrados en el avionazo de Durango fueron separados de la empresa por no seguir los protocolos establecidos en la operación del vuelo 2431.
CPR