El número de estadunidenses que presentaron nuevas solicitudes de subsidio de desempleo aumentó levemente la semana pasada, lo que apunta a un nivel de despidos aún bajo, a pesar de la ralentización del mercado laboral.
Las solicitudes iniciales de subsidios estatales de desempleo aumentaron en 2 mil, a una cifra desestacionalizada de 230 mil en la semana finalizada el 7 de septiembre, informó el jueves el Departamento del Trabajo.
Los economistas consultados por Reuters habían pronosticado 230 mil solicitudes para la última semana.
Los datos de la semana pasada incluyen la festividad del Día del Trabajo.
Las solicitudes tienden a ser volátiles en torno a los días festivos. Sin embargo, apenas han variado desde que a finales de julio cayeron desde un máximo de 11 meses de 250 mil solicitudes.
La ralentización del mercado laboral se debe a la reducción de la contratación por parte de las empresas, ya que la subida de las tasas de interés frena la demanda en toda la economía.
Los datos del gobierno de la semana pasada mostraron que las nóminas no agrícolas aumentaron menos de lo esperado en agosto, pero la tasa de desempleo cayó al 4.2 por ciento desde 4.3 por ciento de julio.
En este contexto de ralentización del mercado laboral, se espera que la Reserva Federal inicie el próximo miércoles su ciclo de flexibilización de la política monetaria, con un recorte de tasas de 25 puntos básicos garantizado después de que el aumento anual de los precios al consumo se ralentizó considerablemente en agosto, aunque se mantuvo cierta rigidez en la inflación.
El banco central ha mantenido su tasa de referencia a un día en el rango actual del 5.25-5.5 por ciento durante un año, tras haberlo subido 525 puntos básicos entre 2022 y 2023.
El número de personas que reciben prestaciones tras una semana inicial de ayuda, una aproximación a la contratación, aumentó en 5 mil, a mil 850 millones ajustados estacionalmente durante la semana que finalizó el 31 de agosto, según mostró el informe de solicitudes.
MRA