Stellantis, el fabricante mundial de automóviles, tuvo un beneficio récord de 10 mil 900 millones de euros, unos 12 mil millones de dólares, en el primer semestre de 2023, es decir, un aumento de 37 por ciento interanual, empujado por los precios elevados de sus vehículos.
En un mercado que se recupera lentamente, las ventas del fabricante de las marcas Jeep, Peugeot, Fiat y Alfa Romeo mejoraron en sus dos principales zonas de actividad, Europa y América del Norte, con una facturación global en alza del 12 por ciento hasta los 98 mil 400 millones de euros en el semestre.
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Estos números demuestran "la fuerte resiliencia y la fuerte concentración" del grupo en sus objetivos, celebró el director general de Stellantis, Carlos Tavares, durante una conferencia de prensa.
El margen de beneficio bajó levemente con respecto al récord del primer semestre de 2022, de 14.5 por ciento a 14.4 por ciento, pero Stellantis se mantiene por encima de otros fabricantes históricos e incluso de Tesla, que recortó con fuerza sus precios, subrayó Tavares.
"Efectuamos varios aumentos de precio y nuestro grupo supo mantenerse perfectamente", indicó la nueva directora financiera de Stellantis, Natalie Knight.
En América del Norte, el mercado más importante para el grupo, las ventas aumentaron 7 por ciento interanual gracias al vehículo familiar Chrysler Pacifica, los modelos Dodge y el Jeep Compass.
En Europa, las ventas crecieron 9 por ciento con respecto a un débil primer semestre de 2022, con buenos números para el utilitario Fiat Ducato, el pequeño Fiat 500, el Alfa Romeo Tonale y los Opel Astra y Corsa.
Las ventas de los vehículos híbrido y eléctricos aumentaron 24 por ciento en el semestre, a 169 mil unidades.
El grupo inauguró a finales de mayo su primera fábrica de baterías en el norte de Francia y prevé construir cinco más en los próximos cuatro años en Italia, Alemania, Estados Unidos y Canadá.
srgs