México debe empezar a ser atractivo para las empresas fabricantes de autos provenientes de Asia, incluye Tamaulipas en esta opción y lograr el arribo de plantas para empezar a mandar los vehículos a Sudamérica un mercado en crecimiento alivia un poco el impacto de los aranceles al acero y el aluminio implementados por Estados Unidos.
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Los economistas Jorge Pérez y Rogelio Cogco, catedráticos de la Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT), expusieron que dicha opción ante las posibilidades de migración de complejos de producción por las compañías del ramo como General Motors, Ford y Chevrolet, derivado de las presiones del presidente Donald Trump para fortalecer su economía.
En una plática ante alumnos de dicha carrera en la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales, expusieron el panorama planteado por dicha administración, además de las acciones implementadas por el gobierno mexicano. Aseguraron que aunque el proceso de traslado de los complejos no se concretará en el período del republicano, sí estiman la construcción de unidades motrices fuera del país.
“Como no toda la industria se moverá, China tiene un papel fundamental para sustituir, con un mercado de vehículos asiáticos al alza, posicionándose en los primeros lugares y en América Latina, principalmente México, hace falta plantas de producción de esas unidades. Eso puede compensar el golpe de los aranceles”, expresó Jorge Pérez.
¿Cuándo se dará la movilidad de la industria automotriz a EU?
Recalcó que la movilidad de la industria automotriz hacia Estados Unidos no se dará en los próximos seis meses, progresivamente se verá en dos años como los impuestos para no afectar tanto. En ese tramo, dijo, el gobierno norteamericano intentará ganar negociaciones, pero parte de las marcas de esa nación se relocalizarán.
Por su parte, Rogelio Cogco apuntó se ve una una situación intensa en negociaciones entre los involucrados y la política mexicana es ver los puntos sectoriales de la economía, analizar las cadenas de valor, su dependencia con el exterior e iniciar la producción local a largo plazo.
“El impacto en el flujo de divisas no es unidireccional, pues Estados Unidos depende de sus fábricas en otros países para tener el producto final. Los aranceles traen un efecto inflacionario para su económica y para México hay un riesgo, desde el bloqueo a las exportaciones y la contracción, como la pérdida de empleos”, puntualizó.
BRR