Etiquetada como una experiencia más digital, flexible y personalizada, la tendencia tie-less banking o “banca sin corbata” es resultado de las necesidades de los clientes por tener acceso a servicios bancarios y financieros durante la pandemia, pero sin la necesidad de acudir a las sucursales físicas, explica el especialista Hassan Mansur González.
El también empresario detalla que se puede traducir como una transformación de la banca tradicional en un formato menos formal y más accesible, que tiene como base la experiencia online, pero al mismo tiempo, dicha tendencia no es exclusiva de las generaciones más jóvenes; ya que, algunos estudios, dijo, han demostrado que adultos mayores de 50 años en adelante se han decantado por la misma.
- Te recomendamos ¿Conservas alguno? Estos son los boletos de colección del Metro de CdMx que se venden en miles de pesos Negocios
Hassan Mansur González destaca datos obtenidos por una encuesta de la empresa especializada en software empresarial para bancos y servicios financieros, Temenos AG, los cuales revelaron que el covid-19 aceleró drásticamente el uso de servicios bancarios basados en sitios web y en móviles en gran parte de la región.
Además, precisa que particularmente en México, el 57.1 por ciento de los encuestados manifestó su inclinación por el acceso a la web y el soporte al cliente 24/7 como factores determinantes para elegir una institución financiera.
“En México y varias partes de Latinoamérica, adquirió un gran auge la tendencia tie-less banking, lo que nos dicta que los usuarios de la banca cambiaron, pero también la propia banca está llevando a cabo una transmutación basada en las preferencias de sus clientes, lo que en el transcurso les implica mayor inversión en innovaciones para sus servicios”.
El empresario lagunero sentenció que esto podría derivar en varios efectos para el sistema bancario, uno de ellos asociado a que la infraestructura de sucursales de los bancos quedaría obsoleta; además, aumentarían de manera considerable en los próximos años la transferencia de riqueza entre generaciones, lo que detonaría aún más el uso de la banca móvil y, paulatinamente, se irán integrando soluciones de Inteligencia Artificial (IA).
“Temenos AG revela datos importantes como que los bancos aumentarán sus inversiones en productos, investigación y desarrollo considerablemente; ya que, por ejemplo, entre 1990 y 2020 gastaron alrededor de 2 mil 100 millones de dólares en dichos conceptos, pero tan solo entre 2021 y 2024 se proyecta que el gasto ascienda a mil 100 millones de dólares”.
Sobre el nivel de involucramiento y familiarización de los usuarios con dichos servicios, Mansur González indica que se trata de personas mucho más informadas y con tendencia a interactuar naturalmente con ecosistemas tecnológicos y simplificados.
“El 38.9 por ciento de los mexicanos utiliza internet para verificar la información de las entidades financieras con las que pretende interactuar; en tanto, 62.3 por ciento recurre a dispositivos móviles para planificar sus finanzas; lo que nos lleva hasta la reducción del uso de efectivo para realizar las transacciones de manera presencial, que en México se redujo de 85.5 por ciento a 30.2 por ciento al comenzar la pandemia”, dijo.