El turismo médico es uno de los sectores dentro de la industria de viajes que más creció en México, principalmente en la frontera con Estados Unidos, algo que el fisco mexicano no logra capitalizar, pues hay una gran evasión en esta actividad.
El presidente de la Federación Mexicana de Asociaciones Turísticas (Fematur), Jorge Hernández, reveló a MILENIO que por esta práctica no se paga al Servicio de Administración Tributaria (SAT) cada año alrededor de 500 millones de dólares, aproximadamente 9 mil millones de pesos.
Esta cifra es muy superior a todo el presupuesto anual de la Secretaría de Gobernación, que para este 2023 se calcula en 7 mil 600 millones de pesos, o la inversión del gobierno federal en su programa de conservación y mantenimiento de la red federal libre de peaje, que se ubica en 8 mil 582 millones de pesos.
“El turismo médico se sigue incrementado en su actividad de recepción de viajeros extranjeros; pero de la misma forma aumentó la evasión de impuestos”, expuso Hernández.
El método en cómo evaden impuestos en esta actividad turística, según el presidente de la Fematur, es que al momento de pagar los servicios prestados, no se facturan, y solo se llega a dar un simple recibo o en muchas ocasiones ni eso, solo un papel con algunas cifras.
Por esto mismo que no se paga al fisco mexicano, los turistas en sus atenciones médicas en México obtienen grandes beneficios, como recibir un costo 40 por ciento menor a lo que costaría en su país de origen.
Las entidades que más reciben a este tipo de viajeros son Baja California, Baja California Sur, Ciudad de México, Chihuahua, Jalisco, Nuevo León, Puebla, Quintana Roo, San Luis Potosí, Sonora, Tamaulipas y Yucatán.
“Se tiene que obligar a las compañías o consultorios que realmente den comprobante de su trabajo, se factura muy poco. Hay evasión de impuesto y no podemos tener una cifra de lo que realmente representa el turismo medico”, afirmó Jorge Hernández.
Hernández explicó que tanto los consultorios, como los médicos que participan en este sector de turismo son profesionales, con todas las credenciales para realizar los procedimientos, por lo que el único pendiente es el hecho que no se facturan los servicios prestados.
De acuerdo con datos de la Secretaría de Turismo (Sectur), del total de viajeros extranjeros que vienen al país por estos servicios, 70 por ciento son estadunidenses y se espera que la cifra aumente en los próximos años, cuando la generación de los baby boomers tengan una mayor edad.
El presidente de Fematur señaló que los principales servicios que demandan los turistas extranjeros son estéticos, en primera instancia; seguido de los odontológicos y y después otro tipo de enfermedades.
“La calidad de los trabajos médicos realizados en México son igual o mejores a los que se otorgan en Estados Unidos, con el plus que el precio es más económico”, expuso.
Según datos de Deloitte, el turismo médico en el país tiene un valor aproximado de 8.8 mil millones de dólares, lo que representaría 5.8 por ciento del valor mundial de esta actividad dentro de la industria de viajes.
México es el segundo país a escala mundial de mayor importancia en este sector, con una recepción anual aproximada de 1.2 millones de viajeros; solo detrás de Tailandia, con 1.8 millones.