Ante la decisión de la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) de frenar la reforma a la regulación de transporte en los Aeropuertos de México para permitir que taxis de plataforma puedan dar servicio, Nicolás Sánchez, director de asuntos públicos de Uber México, remarcó que esto se debió a un grupo minoritario por lo que pidió que se escuche a los usuarios.
"Esto no es una guerra entre taxis consecionarios y Uber, esto es buscar darle alternativas a los usuarios (...) la autoridad debe escuchar a los usuarios", expuso en entrevista con MILENIO Televisión.
Destacó que no es normal que los turistas deban esperar de dos a tres horas para poder tomar un transporte, se deben dar alternativas como sucede en los 300 aeropuertos a nivel mundial dónde ya se permite el paso a transportes de plataformas.
Recordó que desde hace dos años el presidente Andrés Manuel López Obrador pidió a SICT dar una solución a este problema y que coexistan las alternativas de movilidad, el cual quedaría con la reforma a la ley, pero que un grupo minoritario fue quien la frenó.
"El Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) recibe anualmente a 50 millones de personas, se requiere darles opciones", remarcó.
Dijo que con la nueva regulación se tendrían reglas que cumplirían los conductores de Uber sin problema, pero al frenarlo solo afectan a los usuarios.
Nicolás Sánchez recordó que aún sigue vigente el amparo que no permite al AICM multar a los socios de Uber por entrar a dar servicio dentro del aeropuerto, por lo que pidió a los usuarios tener confianza en usar la plataforma.
Incluso confirmó que se les dió un bono de 25 pesos en estos días a los conductores para que dieran el servicio en el aeropuerto como un "reconocimiento" y porque saben que son sometidos a presión de grupos en esos puntos.
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MRA