En 2018 las ventas de vehículos eléctricos sumaron 2.1 millones de unidades, un incremento de 64 por ciento en comparación con 2017 y lo que representó 2.2 por ciento de las ventas globales de vehículos ligeros.
El 69 por ciento de esos autos fueron totalmente eléctricos mientras que 31 por ciento fueron híbridos, de acuerdo con datos de EV-Volumes.
Nissan Leaf, Renault Zoe, Hyundai Kona EV, BMW i3 y Tesla Model 3 son los modelos de éxito.
De acuerdo con datos de Jato, proveedor de información para el análisis de las tendencias del mercado automotriz, citada por Expansión, Noruega es el país con más porcentaje de autos eléctricos (59%), seguido de Suecia (13.5%), Portugal (5.2%), Francia (2.6%), Alemania (2.6%), España (1.4%), Italia (0.4%) y República Checa (0.3%).
La principal razón por la que los países europeos están a la cabeza en la lista es porque desde hace años desarrollaron la tecnología y el marco político para que así suceda.
Actualmente, los nuevos objetivos estrictos de emisiones de dióxido de carbono que se introducirán gradualmente el próximo año en toda la Unión Europea (UE), con la amenaza de multas punitivas para quienes no cumplan, empujan a los países a crecer este mercado.
Sin embargo, en general, la industria no está lista. "Va a ser un gran trabajo", dijo el mes pasado Carlos Tavares, director ejecutivo del propietario de Peugeot, PSA.
Según las reglas, los fabricantes de automóviles deben reducir sus emisiones promedio de la flota a menos de 95 gramos de CO2 por kilómetro para 2021. Se enfrentarán a una multa de 95 euros por cada gramo de CO2 que supere el objetivo, multiplicado por la cantidad de autos vendidos ese año.
No obstante, las emisiones van en la dirección equivocada. Las emisiones de CO2 de los automóviles nuevos están aumentando a medida que los consumidores rechazan los modelos diésel y optan por alternativas a la gasolina, mientras que el cambio hacia vehículos deportivos más pesados aumenta aún más los niveles de contaminación.
Los nuevos datos para 2018 mostraron que las emisiones promedio aumentaron a un máximo de cuatro años de 121 g de CO2 / km, según Jato Dynamics.
Las ventas de SUV, que son más pesadas y, por lo tanto, producen más CO2, han aumentado en tres cuartos desde 2015, según IHS Markit.
Los compradores perdieron la fe en las credenciales ecológicas de los automóviles diésel tras el escándalo de Volkswagen en 2015, cuando se supo que los automóviles producían niveles mucho más altos de óxidos de nitrógeno nocivos de lo que se anunciaba.
El escándalo asestó un golpe al diésel y a los fabricantes de automóviles que habían confiado en el combustible para reducir las emisiones de CO2, ya que los vehículos diésel normalmente emiten una quinta menos carbono que los automóviles de gasolina.
Los vehículos diésel representaron tanto como el 56 por ciento de las ventas de la UE en 2011, pero el año pasado la participación cayó al 37 por ciento. Todo esto ha dejado a la industria en un aprieto.
Territorio nacional
En México esta tecnología aún está lejos de consolidarse. Aunque existe una oferta comercial de autos eléctricos en el país, respaldados por grandes firmas automotrices, aún hay barreras para que su uso se pueda generalizar en el uso privado, como la autonomía, la infraestructura, el desconocimiento de la tecnología y los costos de mantenimiento o reparación.
De acuerdo con las cifras publicadas por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), durante diciembre 2018 la venta de vehículos híbridos y eléctricos fue de 2 mil 153 unidades, 59.4 por encima de lo registrado en el último mes del 2017.
Las ventas de vehículos híbridos y eléctricos estuvieron compuestas por 28 eléctricos, 153 híbridos conectables y mil 972 híbridos. En el acumulado enero - diciembre 2018 se comercializaron 17 mil 807 vehículos con estos tipos de tecnologías.
Según el especialista Carlos Alberto Bautista, de la Facultad de Negocios de la Universidad La Salle, el principal impedimento para que esta tecnología despegue es el alto costo de las baterías y la falta de infraestructura para la recarga de estos vehículos.
El especialista dio como ejemplo el caso de un telefóno celular, que tiene una batería nueva con una vida promedio de 2 a 3 años. Al término de su vida se tiene que reemplazar por una nueva.
Además, hasta julio del año pasado, la Coordinación del Programa de Ahorro de Energía del Sector Eléctrico (PAESE) de la Comisión Federal de Electricidad reportaba 2 mil 17 espacios de recarga para vehículos eléctricos (electrolineras) en el país.
La mayor cantidad estaba concentrada en Ciudad de México (19 por ciento), Nuevo León (8.9) y Jalisco (8.8 por ciento).
Otra de las principales barreras para el aumento en el país de esta tecnología es el costo. Un auto de este tipo cuesta en promedio 800 mil pesos, suma superior a la de uno con motor de combustión, pero por el ahorro de gasolina, es una opción.
Las automotrices han hecho esfuerzos por mejorar las características de sus vehículos, como Nissan, ya que su nuevo LEAF ofrece 240 km de autonomía - lo cual representa un 40 por ciento adicional en comparación con la generación anterior - permitiéndole a los conductores disfrutar de viajes más largos y seguros.
Esta semana, la filial mexicana de la firma alemana Audi anunció que la planta de San José Chiapa en Puebla producirá el primer auto híbrido Premium en el país, el nuevo Audi Q5, que se exportará a Norteamérica y Europa.
"Con la producción del nuevo Audi Q5 hibrido, Audi México inicia su camino hacia la electrificación” afirmó Andreas Lehe, Presidente Ejecutivo de Audi México, luego de informar que para este proyecto se crearon alrededor de 60 puestos de trabajo.
Con información de Expansión, Financial Times, Yeshua Ordaz y Pilar Juárez
evl