Uno de los argumentos que llevó al ejecutivo a enviar la iniciativa de reforma constitucional en materia energética, fue la variabilidad de las energías renovables y el desorden en los permisos de generación otorgados en la administración pasada; sin embargo, ninguno de estos debería de ser problema si se realiza una planeación adecuado y las inversiones necesarias.
En el noveno foro de Parlamento Abierto dónde se discute la iniciativa del ejecutivo, el coordinador de Energía del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), Óscar Ocampo, aseguró que la confiabilidad del sistema eléctrico, requiere una mayor integración de energías renovables, solar-fotovoltaica y eólica, que aproveche y maximice el potencial geográfico y climático del país.
"La intermitencia ó variabilidad de las renovables se pueden predecir, sabes cuando hay viento y cuando no hay, cuándo hay luz y cuando no. La variabilidad en sí mismo no tiene por que ser un problema si se da la planeación adecuada del sistema, y si se dan por supuesto, las inversiones adecuadas en el sistema", expresó Óscar Ocampo.
Mientras que en una postura a favor de la reforma, el jefe de Unidad de Ingeniería de la Operación del Centro Nacional de Control de Energía (Cenace), Nahúm Román, dijo que existe un incremento de la vulnerabilidad del sistema por la inserción desordenada de centrales renovables intermitentes.
"Los pocos elementos que se han añadido a la regulaciones de transmisión del sistema internacional del sistema de interconexión nacional son refuerzos locales. La reforma de 2013 establece un proceso desarticulado e ineficaz de planificación del sistema eléctrico nacional", dijo en su participación.
Aseguró que en el norte del país la generación creció hasta 40 mil megavatios de capacidad instalada y la demanda es cerca de 20 mil, es decir, se tiene 20 mil megavatios, que en el mejor de los casos se tiene que exportar al sur, lo que significa un estrés para la red eléctrica, sumado a qué la generación, es en su mayor parte intermitente, con cerca del 20 por ciento.
Por su parte el especialista del sector eléctrico, Víctor Ramírez, expuso los proyectos de líneas de transmisión que fueron cancelados al inicio de la administración, así como proyectos de almacenamiento de gas, que puedo haber ayudado en el apagón de febrero del año pasado, así como las subastas de potencia por confiabilidad, así como de mediano y largo plazo.
Añadió que el Programa para el Desarrollo del Sistema Eléctrico Nacional (Prodesen), donde se establece la planeación anual del sistema eléctrico, ha tenido un nulo avance y se ha incumplido en su emisión. También apuntó se regresó del retiro el 10 por ciento de la capacidad de generación indicada en el Programa Indicativo para la Instalación y Retiro de Centrales Eléctricas (PIIRCE) de 2019.
"El Prodesen tiene un sistema de retiro de centrales eléctricas. Unidades que ya habían salido se trajeron del retiro, de hecho se presumieron por CFE. Está capacidad se retiró por su edad, porque eran inseguras, viejas y muy caras. Esto está generando problemas de un exceso de energía o capacidad instalada que no necesitamos", concluyó.
srgs