Dentro de la convivencia de la sociedad general con el coronavirus, el uso del cubrebocas se ha vuelto una medida controvertida con posturas a favor y en contra de esta medida. En el estado de Jalisco, el uso obligatorio de cubrebocas para actividades fuera del hogar comenzó oficialmente el lunes 20 de abril.
El virus se transmite principalmente mediante la transmisión de gotículas respiratorias (tos, esturnudos, etc.) de una persona infectada y el contacto cercano a la misma u objetos contaminados; por ello, la principal función del cubrebocas es como un mecanismo de prevención y control de fuentes.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, diversos estudios en torno a la gripe, el síndrome gripal e infecciones por otros coronavirus humanos han demostrado que el uso de cubrebocas puede prevenir la propagación de gotículas de una persona infectada a otras personas y su entorno inmediato.
- Te recomendamos Tips para evitar posibles fraudes bancarios en línea Ocio
Por otro lado, hasta el 5 de junio la OMS indicó que no hay pruebas directas sobre la eficacia del uso de mascarillas en personas sanas para prevenir el covid-19. No obstante, teniendo en cuenta los estudios de transmisión presintomática y asintomática, así como la dificultad para lograr el distanciamiento físico, la OMS ha aconsejado a las autoridades a alentar el uso de cubrebocas en al público general considerando ciertos criterios:
· Riesgo a la exposición al virus. En caso de transmisión comunitaria y poca o nula capacidad para realizar otras medidas de contención como rastreo de contactos, pruebas de laboratorio y aislamiento de presuntos casos. De igual manera, en determinadas ocupaciones que requieren un contacto estrecho con el público.
· Vulnerabilidad de un individuo o grupo. Las personas de tercera edad, hipertensos, inmunodeprimidos, diabéticos, pacientes de cáncer y otros padecimientos que los ubiquen en la población de riesgo.
· Entorno donde vive la población. Lugares densamente población y entornos donde no es posible guardar la distancia mínima de 1 metro, como es el caso del transporte público y otras congregaciones.
· Factbilidad, La disponibilidad y el costo de las mascarillas, así como el acceso a agua limpia para lavarlas en caso de portar mascarillas reutilizables.
Además de los argumentos anteriores, el uso del cubrebocas es una medida con la que toda la población puede contribuir para prevenir la propagación del virus, disminuye el estigma de su uso en personas infectadas o personal médico, puede disminuir el riesgo de exposición a personas infectadas que no presentan síntomas y también puede ser una fuente alternativa de ingresos para los fabricantes y distribuidores de los distintos tipos de mascarillas. No obstante, hay que tener en cuenta que junto al uso del cubrebocas se deben continuar las otras medidas de prevención como la constante limpieza de manos.
Fuente: OMS
El uso correcto
El cubrebocas puede ser una herramienta importante de prevención, siempre que se use con cuidado para evitar ciertos riesgos que pueden propiciar el contagio pese a su uso. Al momento de colocarte un cubrebocas, recuerda:
· Antes de colocar el cubrebocas: Lávate las manos, revisa que no esté dañada y localiza la pieza de metal o borde rígido en la parte superior (en caso de tener uno).
· Al momento de colocar la mascarilla: Cubre la boca, nariz y barbilla, asegúrate de que quedé ajustada sin aberturas por los lados. Si cuenta con una pieza de metal, haz que cubra la nariz, puedes utilizar la punta de tus dedos para moldear el área y lograr mayor ajuste.
· Durante el uso de la mascarilla: Evita tocas la mascarilla, especialmente por la parte de adelante ya que puede estar contaminada, no te quites el cubrebocas para hablar, mucho menos con una persona a una distancia menor de 1 metro, no lo coloques en el cuello o alguna otra parte del cuerpo, cambia de cubrebocas si éste se encuentra sucio o mojado.
· Para retirar el cubrebocas: Lava tus manos antes y después de manipularlo, retíralo desde los elásticos y una vez que termines mantenlo alejado de ti y de cualquier superficie. En caso de ser desechable, tíralo inmediatamente en un bote de basura cerrado. Los reutilizables pueden colocarse en una bolsa con cierra fácil para después lavarlos. Jamás compartas un cubrebocas.
- Te recomendamos Antojitos mexicanos: Los nutrientes de los platillos mexicanos Ocio
¿Quién no debe usarlos?
Niños menores de 2 años de edad
Personas con problemas respiratorios
Personas que estén inconscientes, incapacitadas o no sean capaces de quitarse la cubierta de tela para la cara sin ayuda. Los centros también reconocen que los cubrebocas podrían exacerbar una afección física o mental, llevar a una emergencia médica, o generar preocupaciones de importancia en cuanto a la seguridad.
Para ello se deberían considerar las adaptaciones y alternativas. Por ejemplo, las personas que son sordas o tienen dificultad para oír, o quienes interactúan o cuidan a personas que tienen impedimentos auditivos no puedan usar cubiertas de tela para la cara si necesitan leer los labios para comunicarse. En este caso, deben considerar usar cubiertas para la cara transparentes. Si no hay disponibilidad, considerar la comunicación escrita.
Para ciertas personas, como aquellas con discapacidades intelectuales y del desarrollo, afecciones mentales u otras sensibilidades sensoriales, el hecho de usar una cubierta de tela para la cara puede resultarles un reto. Es posible que los niños más pequeños (p. ej., en etapa de preescolar o a principios de la escuela primaria) no puedan usar una cubierta de tela para la cara decuadamente, principalmente por un tiempo prolongado. Hay que garantizar que el tamaño y el ajuste sean adecuados y educar a los niños recordándoles acerca de su importancia
Tampoco es recomendable usar mientras se realizan actividades que pueden provocar que se moje como cuando se nada en la playa o en una piscina. En el caso de las actividades como la natación, es importante mantener la distancia física. Por ejemplo en actividades como correr, si usarlo causa dificultad para respirar, se puede considerar llevar a cabo la actividad en un lugar donde haya una mayor ventilación y un mayor intercambio de aire, en exteriores en lugar de interiores manteniendo distanciamiento social de las demás personas.
Si se utilizan protectores faciales sin cubrebocas, se deben ajustar en los laterales de la cara de quien los usa y se deben extender hasta debajo de la barbilla.
Los protectores faciales desechables solo se deben usar una sola vez. Los protectores faciales reutilizables deben limpiarse y desinfectarse después de cada uso. No se recomiendan en recién nacidos ni en bebés.
¿Cómo lavarlos?
Los cubrebocas deberían lavarse después de cada uso. Siempre es importante quitárselo y lavarse las manos después de manipular o tocarla.
Lavadora: Usar el detergente para ropa habitual y la temperatura de agua máxima permitida para la tela que se utilizó para confeccionarla.
Lavado a mano: Preparar una solución de blanqueador con cloro al mezclar: 5 cucharadas (1/3 de taza) de blanqueador con cloro de uso doméstico por galón de agua a temperatura ambiente o 4 cucharadas de blanqueador con cloro de uso doméstico por cada cuarto de agua a temperatura ambiente Es importante revisar la etiqueta para confirmar si el producto blanqueador con cloro es apto para desinfección. Algunos blanqueadores con cloro, como los diseñados para usar de manera segura sobre ropa de color, posiblemente no sirvan para desinfectar.
Nunca mezclarlo con amoníaco ni con otros productos de limpieza. Dejarlo en remojo en la solución por 5 minutos. Enjuagar bien con agua fría o a temperatura ambiente. Asegurarse de secar la cubierta para la cara por completo después de lavarla.
¿Cómo secar?
En la secadora, usar la temperatura máxima y dejarla en la secadora hasta que esté completamente seca. Si prefiere el secado al aire libre, dejarla extendida hasta que esté completamente seca. Si es posible, exponer la cubierta para la cara directamente al sol.
- Te recomendamos Reciclaje: Cada cosa en su lugar Ocio
Tipos de cubrebocas y máscaras de protección
- Cubrebocas quirúrgico: No filtra el aire que inhalamos, por lo que no protege de posibles contagios, su principal función es evitar las transmisiones y es importante usarla, cuando se está en contacto con otras personas.
- Mascarilla de alto riesgo o alta eficacia N95 o FFP2: Son más profesionales, suelen ser usadas por el personal de salud. Se adaptan a la forma de cada rostro lo cual permite un mejor sellado.
- Cubrebocas de tela: El artículo más común en esta pandemia, por su simplicidad a la hora de hacerlos en casa, además de su precio. De este tipo hay muchas opciones, ya que no todos las personas utilizan la misma tela para fabricarlos. Un dato que comparten los especialistas es asegurarse de ver cómo pasa la luz solar a través de la tela, eso puede ayudar a decidir si es buena candidata para realizar un cubrebocas casero. Entre menos luz pase, mejor será la opción. Un dato igual de útil para la compra.
Fuente: Centros para el control y la prevención de enfermedades
LAT