Tenía que ser Netflix la compañía que se aventara el paquete de hacer la serie del asesinato de Luis Donaldo Colosio.
¿Por qué? Porque Netflix es una corporación global, lo cual se traduce en libertad de expresión y en cero conflicto de intereses.
¿Qué televisora nacional se atrevería a contar esta historia hoy considerando el posicionamiento actual del PRI y que semejante atrevimiento podría molestar a muchas personas?
¿De qué le estoy hablando? De Historia de un crimen: Colosio, la serie que se va a estrenar mañana en Netflix y que tiene todo para triunfar y escandalizar.
Ojo: Historia de un crimen es una serie antológica. ¿Qué significa esto? Que al igual que American Crime Story y que American Horror Story, va a tratar de asuntos diferentes en cada una de sus temporadas. Netflix, inteligente como ella sola, tuvo a bien iniciar esto con el caso Colosio considerando la importancia del mercado mexicano y el 25 aniversario de esta tragedia, pero en cuestión de meses veremos otros asuntos de otros países de América Latina. Al final va a quedar una especie de enciclopedia televisiva de los más grandes crímenes de nuestra región.
¿Cuál es la nota? Venderle Colosio a las nuevas generaciones porque ellas no solo no lo conocieron, viven en otro país, con un presidente de otro partido y este asunto ha dejado de figurar en las grandes agendas noticiosas con el paso de los años. Ahí está el reto de este concepto en la atención, porque a nivel cinematográfico está tan bien hecho que aunque usted viva en Australia y no tenga la menor idea de dónde queda Lomas Taurinas, se involucra porque se involucra. Colosio es nuestro JFK, un crimen lleno de interpretaciones, de dramatismo, de impacto social.
Lo tremendo es que sí, está lejos, pero no tanto. Muchos de los involucrados, muchos de los afectados, están vivos, tienen voz, sentimientos. No debe ser nada fácil agarrar el celular y ver que algo tan doloroso, tan polémico, está sirviendo para entretener a las multitudes.
Tuve el privilegio de ver por adelantado los dos primeros episodios de esta serie y le doy mi palabra de que están buenísimos. Sé que muchas personas se van a ir con el chisme de que si Jacobo Zabludovsky, de que si Carlos Salinas de Gortari, de que si Talina Fernández. La verdad es que esto puede competir directamente contra títulos tipo The Assassination of Gianni Versace o The People vs O. J. Simpson y meterles un susto. Es un trabajo exquisito de dos brillantes directoras: Hiromi Kamata (Diablo guardián) y Natalia Beristáin (Los adioses).
¿Sabe usted lo que hicieron estas señoras? Combinaron imágenes reales con su propuesta cinematográfica. Resultado: usted está mirando a Luis Donaldo Colosio, el de verdad, la cámara gira y luego está mirando a Jorge A. Jiménez (Narcos) dándole vida a Colosio, y todo está igual.
Y no solo estoy hablando de la escena uno del capítulo uno. ¡No! Esto ocurre varias veces y cuando llegamos a Ilse Salas interpretando a Diana Laura Riojas no hay manera de no quedarse con la boca abierta. Historia de un crimen: Colosio es un gran trabajo que dice cosas que nunca se habían dicho a ese nivel sobre este caso. Luche por verla. Le va a encantar. De veras que sí.
alvaro.cueva@milenio.com