Pequeñas maravillas

Estado de México /

En estos tiempos, que el calentamiento global ha modificado los ciclos naturales, vivimos eventos atípicos que crean condiciones para que algunos seres vivos estén presentes aun cuando no es la época en que tradicionalmente los vemos.

Los mosquitos han prolongado su estancia en el entorno donde habitamos, algunos insectos que vemos en abril y mayo están apareciendo meses después, quizá por la presencia de lluvia fuera de temporada.

Uno de estos casos es el de un pequeño y hermoso miembro de la Clase Insecta, que se le conoce por diversos nombres, empezando por su largo nombre científico Coccinella septempunctata, derivado del latín “coccinus” escarlata, y de siete puntos por sus manchas negras en la cubierta de sus alas llamados élitros, con esta descripción se reconoce a la representativa Catarina, con otros nombres asociados a figuras religiosas como vaquita de San Antonio, mariquita como se le conoce en España o lady bug “insecto de la dama” por considerarla un regalo de la Virgen María. Y sí, es un regalo cuando se conoce el gran beneficio que representa para los cultivos, pues la Catarina es una gran consumidora de pulgones y plagas lo que permite que los cultivos crezcan saludables, su consumo es de aproximadamente 100 a 2000 pulgones por día, un verdadero festín, por este motivo se cultivan en algunos países para que en forma larvaria que es la más voraz, limpien de pulgones los sembradíos. Giuseppe Mazza (2013).

Las catarinas realizan un proceso reproductivo fascinante, acompañado de la seducción por parte del macho, llegan a depositar de 700 a 1,400 huevecillos en hojas y lugares que les procuren seguridad para el nacimiento de las voraces larvas que completan su ciclo de vida en dos meses. 

Su llamativo color rojo manda el mensaje a sus predadores de que son venenosas, y si se sienten amenazadas fingen estar muertas. Estas benefactoras de cultivos viven en promedio 3 años desempeñando un importante papel en el equilibrio de los ecosistemas.

A lo largo del tiempo se les ha dado una simbología muy particular asociándolas en muchos casos como una conexión entre el mundo terrenal y espiritual, también al renacimiento que impulsa a trascender sucesos difíciles, quizás asociado a la metamorfosis, son también ejemplo de tenacidad y sobrevivencia.

En la naturaleza todo es cuestión de observar y valorar a la biodiversidad, como a la Catarina.


  • Arlette López
  • Facultad de Estudios Superiores Iztacala UNAM
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