Cuando llega la primavera es motivo para realizar múltiples eventos y actividades asociadas a las expectativas que esta época de renovación y renacimiento despierta.
Se pueden enumerar desde la meditación y encuentro con la naturaleza, hasta la visita a las pirámides o sitios emblemáticos para cargarse de energía, y lograr un equilibrio entre las pasiones y las debilidades, dicen los interesados, esta creencia se fundamenta en que el equinoccio de primavera es cuando el día y la noche duran lo mismo por eso el nombre de equinoccio que deriva del latín aequus (igual) y nox (noche) este equilibrio es lo que se busca como frecuentemente sucede como muchas creencias y representaciones que en el imaginario colectivo se hacen en relación a los fenómenos naturales .
El equinoccio de primavera es una fecha con muchas celebraciones en todo el mundo, muchas culturas han construido rituales para celebrar la llegada de la época de la renovación, la fertilidad, el equilibrio, el despertar de la vida después del periodo de invierno.
En la época prehispánica se realizaba el ritual del Tlacaxi-pehualixtli que significa Renovación de la Tierra es decir el inicio de los trabajos agrícolas preparando la tierra para la siembra, aunque no existen registros de actividades en esa época asociadas a este periodo, para cargar energía.
Acudir a las pirámides, vestirse de blanco y recargarse de energía solar es una tendencia relativamente reciente que inició en la década de los años 70 bajo la influencia del “New Age” movimiento espiritual y cultural buscando la reconexión con la naturaleza
Jesús Galindo Trejo, investigador y arqueo astrónomo de la UNAM, refiere que vestirse de blanco, escalar pirámides y demás actividades que se hacen durante el Equinoccio de Primavera en México no corresponde a las tradiciones prehispánicas (reportado por infobae)
La astrónoma y divulgadora científica Julieta Fierro aconseja no acudir a las zonas arqueológicas si bien son momentos significativos, no hay energía especial que se manifieste, sin embargo, la afluencia excesiva puede contribuir al deterioro de esos sitios históricos, aunque está prohibido escalar las pirámides, no falta quien violenta el respeto a estos maravillosos lugares.
Consideremos mejor, que el orgullo por nuestra gran biodiversidad y la rica cultura de nuestro país es la mejor forma de cargarnos de energía todos los días.